En 2021 Muñe Cach, el proyecto de Damián Cacciali, irrumpió en la escena independiente con “Baraja”, uno de los álbumes más interesantes surgidos en lo que va de la década a nivel nacional. Con un estilo muy personal e identificable se hizo un nombre en el ambiente, especialmente dentro del público más curioso y ávido de nuevas propuestas.
Unas semanas atrás vio la luz “Chocolate Rey”, su segundo trabajo con este proyecto. El mismo llega con otro concepto y otras sonoridades, pero manteniendo la chispa, esa que alimenta en vivo acompañado por la banda Los Caramelos, haciendo que cada show sea una fiesta.
El próximo sábado 24, a las 21 hs. Muñe y Los Caramelos presenta en vivo las canciones de “Chocolate Rey” tocando por primera vez en La Trastienda MVD, en una noche que promete varias sorpresas. A propósito de la fecha conversamos con Muñe sobre su reciente lanzamiento.
Por Liber Aicardi
Foto: Yo_magnolia¿De dónde surgen las canciones de “Chocolate Rey”?
Excepto dos canciones, las demás fueron compuestas después de «Baraja». Las canciones surgen en medio de la pandemia con esa diferencia que tienen con las de «Baraja», de la época más «caramelo», más dulce, más fiestero. Quizás este disco sea un poquito más serio, más como el cacao, una cosa más densa. Tienen esas características las canciones.
¿Al momento de componer buscaste despegarte, en cierta manera, de “Baraja”?
Naturalmente yo tengo siempre una tendencia a que el siguiente disco me sorprenda a mí mismo, entonces hay un cambio, hay una transformación.
“Baraja” es un disco bastante de estudio, hecho con sintetizadores, con samples de batería y este es un disco más orgánico. Tiene la parte electrónica, pero también tiene el sonido de la banda, de Los Caramelos.
¿Cuánto pesó la banda en el proceso del disco?
Sí, pesó porque tuvo incidencia, participación en el disco, que en «Baraja» no se dio. Aparecieron todos Los Caramelos participando y se siente el poder ése, porque son temas que tocamos durante un tiempo y hay una diferencia cuando graba una banda en un disco a cuando es solamente con computadora.
¿Cómo es tu proceso de composición?
Generalmente me viene la canción y yo empiezo a maquetear enseguida. Hay muchas de esas maquetas que hoy están en el disco, sintetizadores y esas cosas quedan generalmente porque son el alma de la canción, Un sintetizador con un sonido que le da la personalidad a esa canción no puede irse después. Pero sí se le pueden sumar guitarras, bajos, baterías, percusiones, pero tiene bastante de la maqueta.
¿Cómo llegaste al concepto «Chocolate Rey»?
Yo quería, de alguna manera, marcar ese cambio, esa transformación hacia algo más denso, más oscurito. Me puse a investigar mucho sobre el cacao, por ejemplo. Hice hasta ceremonia de cacao, conocer con qué conecta eso. Y después apareció la palabra «rey», como que el chocolate es el rey del disco, es esa sustancia que atraviesa cada canción. Incluso ahora estoy buscando canciones que me lleven al chocolate, a la sustancia chocolate para la previa al show, canciones que suenen mientras la gente está esperando que salgamos al show.
En Chocolate Rey aparece la cumbia, aparece el rock, aparece el reggaeton, aparecen las baladas… Pero sí, se cita al reggaeton tratando de sacarlo del contexto ese en que, a veces, aparece con una poesía más básica y ponerle un poco más de contenido a ese ritmo que, algo tiene, que ha llegado a tener tanta fuerza en el mundo.
Musicalmente hay una profundización en algunos ritmos como el reggaeton, por ejemplo, que ya habían aparecido en tu disco anterior. ¿Cómo se dio este abordaje a estos ritmos?
Hay una toma, sí, de muchos ritmos. Aparece la cumbia, aparece el rock, aparece el reggaeton, aparecen las baladas… Pero sí, se cita al reggaeton tratando de sacarlo del contexto ese en que, a veces, aparece con una poesía más básica y ponerle un poco más de contenido a ese ritmo que algo tiene que ha llegado a tener tanta fuerza en el mundo.
¿Hay una especie de desafío de tu parte de correrlo, en cierta forma, de ese lugar que mencionabas?
Sí, está el ritmo nomás. Porque las canciones que tienen ese ritmo también tienen guitarras eléctricas, entonces ahí existe la fusión, busco un híbrido, una búsqueda de mezclas.
También aparecen toques de rumba, como en “Origami”…
Sí, se metió una especie de rumba en «Origami». Me gusta ser un poco atrevido con los ritmos porque, en realidad, no estoy haciendo un ritmo así, netamente, pero sí acercándome, coqueteando con diferentes cosas. Porque esa canción que es medio rumba, termina en algo medio electrónico también. La mutación es lo que me interesa.
¿Cómo elegiste los invitados del disco y las canciones en las que participaron?
Cada artista que participa de «Chocolate Rey» está atravesado por el momento de la pandemia. Todos los músicos que participan tenían, quiera o no, una crítica sobre ese momento donde no se podía tocar, no podía haber arte en vivo, entonces tiene que ver un poco con eso. Tanto Hugo Fattorusso, como Martín Buscaglia, Gustavo Cordera y Mínima estaban en una postura similar. Además de la riqueza musical que le aporta cada uno, su tímbrica. En realidad, con Cordera pasó que yo le pasé otra canción para que cantara, pero él me pidió todo el disco y eligió la que al final terminó cantando (“Nuestra intemperie”). Con Martín, también. Yo le pase varias canciones y él eligió su canción, tuvo también ese juego que me encanta, y a la hora de ejecutarla es distinto cuando vos elegís la canción que querés cantar.
Me gusta ser un poco atrevido con los ritmos porque, en realidad, no estoy haciendo un ritmo así, netamente, pero sí acercándome, coqueteando con diferentes cosas. La mutación es lo que me interesa.
Es como un nivel mayor de compromiso ¿no?
Es eso. Hasta le cambió palabras a la canción Cordera… Un atrevido. (bromea)
Encontré un par de referencias en el disco. En «Indios» a José Luis Perales y en «Pantera» a Fernando Cabrera. ¿Cómo llegaron?
En realidad en «Indios» es una cita más a la versión de Jeanette, que a mí me gusta mucho. Es una cita que no llega a ser plagio porque no llega a los compases (se ríe).
Y en “Pantera”, en realidad, creo que la cantada es muy Cabrera, no es una cita directa. Cabrera, para mí, es un referente, lo escuché mucho en un tiempo. Ojalá que algún día la cantara conmigo esa parte.
¿Qué nos podés adelantar de la presentación del disco en La Trastienda?
Van a pasar diversas cosas, va a haber danza, van a haber visuales, estamos trabajando mucho en las luces, va a haber momentos de intimidad y momentos de fiesta. Es como el disco, que tiene mucho subibaja. Van a haber sorpresas, cosas que nunca hicimos con la banda y que ahora vamos a hacer… la verdad que va a estar intensito, vamos a regalar chocolate también.
¿Cómo tomás el hecho de que sea la primera Trastienda en tu carrera?
Es un desafío hacer una Trastienda porque es una sala en donde he visto muchos músicos, he disfrutado mucho los toques ahí. Es una sala en la que me da pila de ganas tocar y creo que lo vamos a disfrutar.
Las entradas para el show de Muñe y Los Caramelos en La Trastienda están a la venta a través de Abitab.
Foto: Yo_magnolia