El próximo martes 23, a las 21:00 hs en Sala Zitarrosa, Inés Errandonea, reciente ganadora del Graffiti a mejor artista nuevo, presentará en vivo su álbum «La vida real», su primer álbum. Dicho trabajo, publicado en 2020 y de la mano de los singles «La moneda», «Isla grande» y, principalmente, «El temple justo» han ubicado a la también integrante del grupo vocal Coralinas, dentro de una generacion de nuevas voces que van forjando un camino dentro de la escena local.
A propósito del show, conversamos con Inés sobre el disco, su forma visceral de componer, que se refleja en sentidas letras y del futuro cercano de su carrera.
Por Liber Aicardi
Comencemos por lo más reciente ¿Cómo tomaste haber ganado el Graffiti a mejor artista nuevo?
La verdad, es re lindo. Es un laburazo tremendo hacer un disco, es algo en lo que ponemos todo nuestro corazón, nuestro trabajo, nuestras expectativas nuestra ilusión… es un mimo. Obviamente que nadie hace nada por los premios, pero, es algo lindo de recibir. Es una alegría que a otras personas les parezca que tu trabajo esta buenísimo. Y, a la vez, es un empujón que ayuda siendo todo tan complejo, y mas en estos últimos años para la cultura. La verdad, me puso re feliz.
En la ceremonia se te vió sorprendida de ganar.
Sí, es que eran diez nominados… También, subir a buscar un premio, para mí, es medio como ciencia ficción.
Hablando, ya, de «La vida real» ¿Lo pensaste de esa forma conceptual desde el comienzo?
Si bien yo ya tenía un EP anterior, que había sido como una mini selección de las primeras canciones que había hecho, sí fue un disco que tiene canciones de distintos momentos, bien de primer disco ¿viste? Pero, al mismo tiempo, cuando empecé a trabajar con Juanito El Cantor, que es el productor del disco, le mandé como treinta y cinco canciones, suponete. Algunas que, yo no sentía que estaban terminadas, pero él igual me decía «mandame todo». Entonces, empecé a seleccionar con él, hicimos una preselcción y dejamos varias fuera del disco. En realidad, no era un proyecto pensado conceptualmente, pero, después cuando empecé a sentir que había un concepto detrás, y a pensar el nombre y demás, tambien, había algunas canciones que no tenían tanto que ver y no entraron. A la hora de elgir en esa última selección, hubo una cosa curatorial de que vayan por este camino pero, relamente, no empezo así.
Es un disco que tiene mucho de catártico ¿no?
Ahora, no todas mis canciones son tan así, pero igual yo soy muy de componer desde ese lugar, medio intenso, digamos. Yo cantaba desde siempre, pero cuando empecé a hacer canciones fue muy por necesidad de decir y, durante unos años, venían desde ese lugar. Siguen, un poco, viniendo desde ese lugar pero, tal vez ahora, tengo otra forma de que lleguen las canciones.
También, en las letras, sos de exponerte. ¿Qué te genera cuando tomás distancia y ves ese nivel de exposición de tus sentimientos y experiencias?
Yo, durante pila de tiempo, no componía. Y no componía, un poco por miedo, y un poco porque no tocaba con mucha seriedad ningun instrumento. Pero, principalmente, por miedo, por no animarme; por no animarme a exponerme, a mostrarme desde ese lugar, a que vean esa verdad. Y cuando sentí la necesidad, y en una combinación de aprender a tocar la guitarra medio de la nada y estar bastante triste, empezaron a salir una cantidad de canciones como si hubiera abierto una canilla, que fue como encontrarme con una verdad tan personal y tan como del cuerpo mía… Fue muy revelador para mí, tipo «quiero hacer esto» y «yo podía hacer esto y no me lo estaba permitiendo» porque, de verdad, me preguntaban «¿yvos no hacés canciones?», yo decía «no, yo sólo canto». Era una especie de postura que yo me la creía que era así, pero, no era que estaba feliz de no hacerlo, porque me lo estaba negando. Entonces, cuando me animé, fui con toda y, también, porque no encuentro otra forma menos reveladora de decir. Es lo que soy, es lo que son las canciones. Nació como destapando la canilla y sale todo lo que sale. Aproveché que me había costado tanto desnudar eso que ahora digo «listo, que sea y que esté como tenga que estar».
Ahora, no todas mis canciones son tan así, pero igual yo soy muy de componer desde ese lugar, medio intenso, digamos. Yo cantaba desde siempre, pero cuando empecé a hacer canciones fue muy por necesidad de decir y, durante unos años, venían desde ese lugar. Siguen, un poco, viniendo desde ahí, pero, tal vez ahora, tengo otra forma de que lleguen las canciones.
¿Te referís, concretamente a una autocensura?
Si, pero, total. Cuando empecé a hacer las canciones no hubo niguna autocensura, digamos. Antes, la autocensura era tan alta como para que yo no hiciera canciones. Directaente, no las hacía. No es que las hacía y no las mostraba; no las hacía, no componía nada. Es medio intenso…
Pero, el hecho de componer desde ahí, también te pone en lugar donde lográs uns identificacíon de parte del otro ¿no?
Es verdad eso. Es como que, cuanto más personal es lo que decís, parece que va a ser más único y, a la vez, es más universal. Sí, siento que me pasa eso y es de las cosas más lindas que me devuleve muchas veces la gente: que las canciones le peguen desde un lugar e identificación. Me llama la atención y, al mismo tiempo, soy consciente de que se ve que en esa honestidad y en esa desnudez, se genera como un diálogo con la otra persona porque no hay misterio en el medio.
Por otro lado esa aperente fragilidad que mostrás en algunas canciones es una forma de empoderarte. Pienso en «El temple justo», por ejemplo.
Es como la fuerza de la vulnerabiildad ¿no? También, hay que ser fuerte para mostrarse vilnerable, es más fácil no mostrarse vulnerable, entonces puede ser por ahí. Es algo que, sí, yo trabajé en mi vida.
¿Musicalmente, cómo definiste el rumbo de las canciones?
La verdad es que yo, mientras compongo, compongo sin pensar demasiado para donde llevar la canción. A veces, cambio cosas, pero, normalmente sale todo medio junto y es lo que va pidiendo la canción sin que yo pueda tomar una decisión clara intelectualmente. Eso, ya, de base de las canciones. Y, a nivel más sonoro, fue un trabajo con Juanito, el productor, que, como te dije, fue un proceso largo que implicó elegir los temas y, a partir de ahi, empezamos a pensar para dónde podían ir las canciones, qué tipo de sonoridades, cosas que a mí ya me gustaban, referencias, instrumentistas, cosas así. Eso fue más tema por tema y, después, empezamos a ver cierta estética que tenía que ver con el disco. Hay cierto tipos de arreglos, hay instrumentos de cuerdas en algunos temas, de vientos en otros … Fue muy en conjunto con «Juani», la verdad.
Es como que, cuanto más personal es lo que decís, parece que va a ser más único y, a la vez, es más universal. Sí, siento que me pasa eso y es de las cosas más lindas que me devuleve muchas veces la gente: que las canciones le peguen desde un lugar e identificación.
¿Qué podés adelantarnos del show presentacion de «La vida real»?
Hace tiempo que estoy trabajándolo adentro, en mi cerebro, y en mi computadora, en mis papeles y hace unos meses que estamos ensayando y trabajando con un montón de otras personas. La verdad que es un show bastante grande que involucra mucha gente en escena y fuera de escena. Primero que nada, tiene que ver con un concepto que hay detrás de la narración, que hay detrás de un espectáculo que me interesa mucho y siento que es como muy propio mío acercarme a las cosas desde ese lugar, desde lo visual, desde lo físico, desde lo performático. Es la primera vez que me voy a lanzar a ese lugar, porque, tambien voy a soltar la guitarra bastante, entonces, voy a andar recorriendo un poco el escenario. Me estoy sacando las ganas de que todo suene como en el disco; va a haber cuerdas, vientos, que son elementos que están en el disco y para mí es un sueño estar ensayando y escuchando esos arreglos al lado mio. Asi que va a ser un show bastane potente y particular. Y van a pasar algunas cosas, prácticamente, irrepetibles.
¿Qué sigue para vos, luego de este show?
Inmediatamente después, dormir un rato (se ríe). Descansar un poquito, pero, no mucho porque no puedo conmigo misma. Tengo muchas ganas de entrar a grabar de vuelta, seguramente un EP o un conjunto de EPs, que depués se conviertan en disco, eventualemtne. Ya tengo bastantes cosas en plan de grabar algunas canciones sueltas y una especie de EP medio conceptual que ya tengo las canciones bastante prontas. Tengo muchas ganas, ya, de grabar de nuevo y de tocar, de moverme. Yo soy re movediza, me encanta tocar acá, tocar allá y en la pandemia fue bastante imposible, así, que tambien, ojalá, recorrer un poco con la musica el interior, el inerior de Argentina, que venía haciéndolo un poco antes de la pandemia y se complicó. En verano, algo de eso, seguro voy a hacer: tratar de moverme lo más posible y seguir metiéndole.
Las entradas se encuentran a la venta a través de Tickantel.