Con el proyecto “Porque todas las quiero cantar: Un homenaje a la canción rochense”, que incluyó la edición de un álbum y un documental, Florencia Núñez consolidó su ascendente carrera que iniciara hace más de una década. Hoy, la cantautora rochense es una de las voces de referencia en la escena local, habiendo obtenido, por mencionar un logro tangible, seis Premios Graffitti en la última edición de los mismos, incluyendo la categoría Mejor álbum del Año. Pero, más allá de este tipo de reconocimientos, su gran mérito, sostenido por el trabajo, es haber emprendido el viaje en busca de aquellos temas que forman parte del cancionero de su Rocha natal y devolverlas con su impronta tanto para compartirlas con las nuevas generaciones, como para remontar a quienes le precedieron a aquellos paisajes esteños, además de acercar a todos los rincones del país un puñado de canciones no del todo conocidas hasta hoy.
El próximo jueves 17, a las 21 hs. en el Teatro Solís, Florencia Núñez tendrá su gran noche, con localidades agotadas, comenzando a cerrar esta fundamental etapa de su carrera para, posteriormente, focalizarse en su nuevo álbum de canciones propias. A propósito de este gran momento por el que atraviesa, conversamos con ella.
Por Liber Aicardi
¿Cómo asimilaste la repercusión que tuvo “Porque todas las quiero cantar”, especialmente el disco, que fue premiado y difundido en medios donde no era habitual que sonaras?
Lo tomo como el resultado de un gran trabajo. Un trabajo de mucha dedicación, de muchos años desde que el concepto y la idea de “Porque todas las quiero cantar” me surgió y, a partir de eso, empecé a trabajarlo. Te diría que lo que estoy viviendo ahora es como el coletazo de ese trabajo. Siento también que gran parte del relativo éxito, llamémosle, tiene que ver con el encare a la hora de trabajarlo ¿no? Eso por un lado. Después está la otra parte, la azarosa, que no depende de nosotros, que tiene que ver con que la gente se apropie del producto, en este caso del disco y de las canciones. Es como que están esas dos cosas conviviendo y yo estoy un poco en el medio, porque a mí también me pasa que las canciones son importantes para mí porque es música con la que yo me crié y que me identifica. Pero por otra lado, ya, a esta altura las siento tan mías que es raro sentir esta repercusión con canciones que han pasado por mí de esta manera.
De alguna manera venís a ser un medio para acercar estas canciones a un nuevo público y, a la vez, traerlas de nuevo a quienes, como vos, crecieron con ellas.
Exactamente. En este proyecto cambio el foco, sale de mí de alguna forma y me utilizo más como un medio que como un fin en sí mismo. Entonces, está bueno porque para mí es colocarme en lugar diferente habilitando otras cosas y otras obras pero también disfrutando, aprendiendo y creciendo en otro aspecto como es el interpretativo y el de producción y, realmente, me sumó. Es un trabajo que, con el diario del lunes, como que no podía salir mal, pero la realidad es que cuando a mí se me ocurrió la idea, lo primero que pensamos en mi círculo, en mi grupo fue “te van a matar”, por meterme con algo tan arraigado ¿no? Pero creo que está demostrado que cuando una hace las cosas con respeto, con dedicación , sabiendo que otros artistas han pasado por estas canciones y las han dejado muy altas, de igual forma, con un respeto y una intención diferente, el público lo entiende eso y se puede apropiar de ellas de una buena manera.
Vos me decís que lo primero que pensabas era que te iban a matar pero, por otro lado, mucha gente, principalmente montevideanos, no conocíamos las canciones. Eso era un punto a favor…
Justamente, el objetivo del trabajo al principio era acercar a nuevos públicos y a nuevas generaciones estas canciones que para mí son tan importantes y que por un tema de territorio o de un rango etáreo o, mismo, por la forma en la que están grabadas – porque no todo el mundo se pone a escuchar vinilos de los 70’s en su casa- se estaba perdiendo un público. Realmente, mi objetivo era ése, era utilizarme como medio para traspasar esas fronteras de tiempo y espacio. Era un trabajo destinado a abrir ese panorama musical al resto del país y hacia el exterior, que el disco sirviera como carta de presentación, de puerta de entrada al resto de la cultura rochense. El público objetivo, digamos, era todo aquél público que estuviera disponible para curiosear. Y lo que pasó fue que revinculamos gente, revinculamos público que había tenido ya un vínculo con la música rochense pero que hacía mucho tiempo que no lo retomaba. Entonces, ahí hubo una vuelta de tuerca que llevó a que las generaciones anteriores a la mía se reengancharan y que esas generaciones engancharan a sus hijos y nietos también.
Al final, esto tiene que ser para todo aquel que quiera escuchar y atreverse a descubrir un cancionero que a priori no es un cancionero muy conocido ni muy mainstream pero que, para mí, siempre fue un cancionero interesante. Yo le vi siempre la veta de que eran grandes canciones que merecían tener otra lectura que sea acorde a este tiempo, porque quizás en veinte años o treinta años venga otro intérprete, otro productor o productora y determine que estas canciones u otras se pueden leer de otra manera que se adapte más a ese tiempo. Eso es lo interesante de la música, que cada uno la puede ir acompañando a los nuevos tiempos de muchas maneras diferentes y que eso haga que las canciones perduren, que tengan nuevas vidas y que acompañen las vidas de otras personas.
Al final, esto tiene que ser para todo aquél que quiera escuchar y atreverse a descubrir un cancionero que a priori no es un cancionero muy conocido ni muy mainstream pero que, para mí, siempre fue un cancionero interesante. Yo le vi siempre la veta de que eran grandes canciones que merecían tener otra lectura que sea acorde a este tiempo, porque quizás en veinte años o treinta años venga otro intérprete, otro productor o productora y determine que estas canciones u otras se pueden leer de otra manera que se adapte más a ese tiempo.
Pero, sí, sos consciente que para muchos, por ejemplo, “Contigo y en el palmar” a partir de ahora, es una canción de Florencia Núñez porque la conocieron en tu versión.
Eso es más relativo porque, para mí, la trascendencia la tuvo Solipalma con esa canción, entonces también tiene que ver con los territorios y con muchas otras cosas. Sí, es probable que mucha gente la identifique conmigo. En realidad, yo soy la primera en aclarar de quién son las canciones porque me parece lo más lógico cuando las canciones no son mías porque, como además soy autora, conozco muy bien lo que es para un autor que alguien más cante tu obra, que la lleve de viaje y la haga suya. Para mí, el reconocimiento a los autores siempre va a estar, de hecho es lo que generó el proyecto: reconocer que hay autores muy buenos y que faltaba, un poco, dispersarlo por el resto del territorio. Puede ser así como tú dices, pero a mí también me da satisfacción saber que voy defendiendo el trabajo de los autores a todos lados donde voy porque me gusta, porque lo disfruto y porque lo hago concienzudamente también, desde lo créditos de las canciones, en las plataformas siempre están presentes los nombres.
¿Cómo es eso de recorrer el país con una película para vos que principalmente sos música?
Creo que lo que ha pasado con la película es que ha tomado como un camino que ha pedido recorrer. La película es una carta de presentación importantísima, en mi caso, para mi trabajo. También es algo en lo que trabajé un montón en el proyecto, dejé la vida (se ríe) en esos minutos de video, entonces, me gustaría que sirva como documento, como una pieza de acervo más que como un gran largometraje. Yo creo que está bueno como un testimonio y lo que deja, y aprovechar que contaba con los testimonios de estos autores y estas personas que quedan en la película. Creo que naturalmente pasa eso que la gente la está pidiendo en el interior, la está pidiendo en Montevideo, todos los días recibo algún mensaje preguntando dónde se puede ver la película y eso está buenísimo. Entonces eso inspiró a que los entes públicos que tienen que ver con la cultura se preocupen por eso y, también, me ayuden a que la película llegue más lejos. Tal es el caso de la Intendencia de Montevideo que, en estos momentos, está la película circulando por diferentes salas y barrios del departamento, y también es el caso de la Gestión Territorial de la Dirección Nacional de Cultura porque en abril comienza la gira por todo el Uruguay de la película de la mano de Efecto Cine, también, con funciones al aire libre – que empezará con diez funciones en diez pueblos del interior y, de ahí, iremos sumando – y mi objetivo es poder acompañar esas funciones, salir con el auto e ir detrás de la camioneta de Efecto Cine (se ríe) para poder encontrarme con la gente, conversar cara a cara, conocer sus impresiones, sus opiniones y sus inquietudes porque es una parte muy rica del intercambio y que disfruto. Además, es una posibilidad muy linda para mí de conocer quienes son las personas que se arriman a una pantalla a conocer la historia que quise contar.
¿Cómo te llevás con la exposición que estás teniendo?
Es cierto que en este último tiempo, desde que empecé a mostrar este proyecto digamos, cambió un poco la impresión o vaya a saber qué, que mucha gente empezó a verme, capaz, de una forma diferente y sí, en muchos casos – te digo porque me lo dicen chiquilinas – que me han empezado a tomar como referente. Y también hay otra realidad y es que voy creciendo y ya no tengo veinte años y, de alguna forma, paso a estar del otro lado, también, como siendo un espejo para las demás y los demás. A lo largo de estos once años en que empecé a hacer mis canciones y a presentarme en vivo, a tocar y a grabar, siempre me tomé este trabajo con mucha responsabilidad. Nunca me tomé nada a la ligera porque, por más que hay una cuestión creativa que tiene que ver con la música, con algo lúdico y fresco, eso no quita que seas profesional. Y siempre traté que cada cosa que hiciera fuera más profesional y más cuidada que la anterior y aprender de cada etapa para aplicar eso que aprendí a una nueva. Entonces, lógicamente, me tomo con responsabilidad el lugar que ocupo hoy, porque si te dijera que no, es mentira. Tampoco me cargo de un simbolismo que no amerita. Yo sigo siendo yo, sigo trabajando por lo que quiero, por lo que sueño, rodeándome de las mismas personas, tratando siempre de armar buenos equipos, de estar cómoda con la gente que estoy y que nada que tenga que ver con la imagen que se hayan generado de mí, no tomo eso como algo que me genere una carga negativa. Trato de hacer las cosas como las venía haciendo siempre, con la diferencia que quizás en el último tiempo llego a más gente o me conoce gente nueva. Siempre es lindo conectar con más personas, que pase esto que pasó, que se agotó en muy poco tiempo el show del Teatro Solís. Son cosas que te alientan a seguir creciendo y a seguir trabajando porque, en la medida en que los resultados empiezan a llegar también te da impulso para seguir y para que las demás personas confíen en el proyecto.
A lo largo de estos once años en que empecé a hacer mis canciones y a presentarme en vivo, a tocar y a grabar, siempre me tomé este trabajo con mucha responsabilidad. Nunca me tomé nada a la ligera porque, por más que hay una cuestión creativa que tiene que ver con la música, con algo lúdico y fresco, eso no quita que seas profesional. Y siempre traté que cada cosa que hiciera fuera más profesional y más cuidada que la anterior y aprender de cada etapa para aplicar eso que aprendí a una nueva.
¿Este show del Teatro Solís es una manera de empezar a cerrar esta etapa de “Porque todas las quiero cantar”?
Sí, tal cual. Es una forma de empezarla a cerrar e, increíblemente, es la primera vez que vamos a tocar el disco entero o que estas canciones van a sonar con toda la banda, pero también esto responde a una inquietud que tengo que es grabar un nuevo disco con mis canciones. Tengo canciones que me tienen contenta y tengo muchas ganas de empezarlas a mostrar y, de hecho, en el concierto voy a mostrar algunas. Entonces, es más eso, como proceso le empiezas a encontrar un cierre. El cierre para mí empieza el 17 y en la medida que podamos girar con la banda, tocar en festivales y teatros del interior lo vamos a hacer. Ni que hablar que mi inquietud máxima, también, es seguir editando material y que este año nos encuentre con un nuevo disco, algo que tengo muchas ganas de que pase.
Es raro esto de hablar de que empezás a cerrar un disco que, a la vez, estás presentando porque no llegaste a hacer una presentación oficial ¿no?
Exacto. Es como una forma de los nuevos tiempos ¿no? Me toca tocar este disco en vivo ya cuando el ciclo se empieza a cerrar… Este concierto va a ser un concierto largo, muy largo. Así que la gente vaya con ganas de disfrutarlo, que vaya con tiempo. Va a ser largo, va a ser intenso, va a pasar por muchos climas, va a tener invitados, va a tener canciones nuevas, canciones de todo mi repertorio, canciones de mis tres discos en total, va a tener de todo. Es una noche muy simbólica para mí porque implica llegar al teatro con el que he soñado siempre, desde que vivo aquí, y que me implica haber dado toda una vuelta para llegar hasta ahí y habérmelo ganado al final, porque en definitiva las cosas se fueron dando de forma genuina, con trabajo, con esfuerzo, con mucha dedicación, con seguir intentando, con dar muchas batallas, con perder muchas, con ganar algunas. Un poco de eso se trata , de celebrarlo y de celebrar la vida, que estamos aquí, que nos podemos encontrar, podemos cantar y que, además, la gente decide acompañarnos. Es una gran sumatoria de cosas, creo que va a ser un concierto muy emotivo también por toda la gente que me acompaña, el grupo increíble que se ha formado.