El instinto animal de Sante Les Amis

Ya han pasado seis años desde que Sante Les Amis lanzó “Sudamericana”, el álbum con el que el quinteto logró proyección internacional de la mano del single “Brasil”, siendo historia conocida su inclusión en el soundtrack del videojuego FIFA 15. Posteriormente, en 2013, la banda editó “Sudamericana, Remixes y Versiones”, un álbum de remixes en el que distintos artistas del Río De La Plata aportaron su lectura de las canciones incluidas en aquél disco. Este año, en el mes de marzo, vio la luz “Sueño Animal”, un disco al que la banda define como más cancionero y orgánico. El próximo 7 de setiembre, a las 21 hs, en la Sala Hugo Balzo del Auditorio Nacional del SODRE, “Los Sante” presentarán en vivo su último trabajo y, antes, conversamos con tres de sus integrantes, Nicolás Demczylo (guitarra), David Stabilito (bajo y voz) y Diego Traverso (guitarra y voz).

Por Liber Aicardi

Foto: Fernanda Montoro

Pasaron seis años de la edición de “Sudamericana” ¿A qué se debió el transcurso de tanto tiempo para publicar “Sueño Animal”?
Nicolás – Tuvo que ver con procesos que tuvimos, tuvo que ver con que “Sudamericana” primero salió acá, en Uruguay, y lo estuvimos tocando. Después, pasó lo de la edición en Estados Unidos y generó otras cosas que implicaron que lo volviéramos a tocar acá mismo, en Montevideo, pero con mayor alcance y nos dio la oportunidad de hacer varios viajes a México, Estados Unidos dos veces, Argentina, que vamos seguido, entonces, todo el proceso fue como largo.
David – Estuvo el disco de remixes entre medio, también, que nos llevó un trabajo, pero, sí, le dimos mucho rodaje a “Sudamericana” y eso alargó los plazos de ponernos a componer el disco nuevo. Creo que fueron tres años que rodamos “Sudamericana” y hace tres años que empezamos la producción de “Sueño Animal”.
Nicolás – Con la búsqueda de “Sueño Animal” nos tomamos nuestro tiempo para estar todos convencidos de lo que estábamos haciendo, de las canciones, de las letras, de la dirección que estaba tomando el grupo y eso, en una banda donde todos opinamos y todos queremos estar felices con el resultado, consume tiempo y energía, que hace que esos procesos, a veces, sean difíciles de transitar, pero muy disfrutables, sobre todo cuando llegas a buen puerto.

¿Cómo influyó ese largo proceso en la creación del disco?
Nicolás – No sé si influyo desde algún lugar estético. Al pasar más tiempo y al estar más tiempo tocando juntos, sí, vamos afianzando como un lenguaje de la banda y ciertos recursos que venimos repitiendo y articulando y desarrollando. En ese sentido, el desarrollo de las voces de “Sueño Animal” tiene que ver con ese proceso; las voces de David y Diego, cómo se relacionan, cuándo se alternan… En este disco hay canciones en las que canta uno y no canta el otro… Todo eso, me parece, tiene que ver con el proceso que hicimos.
David – Tal vez, para el escucha que recibe el disco ya editado y terminado, con las canciones tal cual como son, no es tan claro. Para nosotros, que llevamos un registro de las primeras maquetas que hicimos, son bastantes diferentes varios temas de lo que fueron en ese momento a lo que terminaron siendo en el disco, pero son procesos que nos gustan. Son, a veces, medio tediosos porque somos muchos opinando, pero son necesarios para la dinámica de lo que es cómo plasmamos la música nosotros.

¿Quedaron muchas ideas por el camino?
David – Sí, pero menos que en “Sudamericana” igual.
Nicolás – Yo creo que lo raro de este disco en ese sentido es que canciones en sí, quedó solo una canción que estaba bastante redondeada afuera, que quizás, algún día vea la luz. Quedaron algunas ideas en el camino y, lo que fue curioso, fue que varios arreglos disparadores de canciones quedaron fuera de las propias canciones. El proceso compositivo muy volcado a las voces y al formato canción hizo que, a veces, arreglos que eran puntapiés iniciales para zapar e ir conformando las canciones, cuando llegara el final del tema, quedaran sin lugar prácticamente y terminaran saliendo.

Con la búsqueda de ‘Sueño Animal’ nos tomamos nuestro tiempo para estar todos convencidos de lo que estábamos haciendo, de las canciones, de las letras, de la dirección que estaba tomando el grupo y eso, en una banda donde todos opinamos y todos queremos estar felices con el resultado, consume tiempo y energía, que hace que esos procesos, a veces, sean difíciles de transitar, pero muy disfrutables, sobre todo cuando llegas a buen puerto.

Nicolás Demczylo

¿El concepto lo encontraron fácilmente o salió a raíz de las canciones?
David – Se fue redondeando a medida que íbamos trabajando en el disco. No empezamos con un concepto muy claro, al menos a nivel de letras y de qué decir en las canciones. Eso seguro que no. Se fue dando a medida que íbamos terminando letras y viendo la conexión entre una y otra hasta poner ese concepto de “Sueño Animal” como nombre del disco.
Nicolás – Lo mismo pasó con la estética de las canciones. Por ejemplo, esta canción que no está en “Sueño Animal”, que está grabada, de hecho, en un momento, cuando empezás a tener una visión más general del disco, de repente, encontrás algunos elementos que se empiezan a repetir, entonces, para generar dinámicas, volcás lo que te falta hacer en una dirección concreta o, como en ese caso, prescindís de algo que venía desarrollándose. En ese sentido, el disco, cuando toma todo ese tiempo, te permite tener una visión general como más amplia. Naturalmente, todo lo que hemos hecho nosotros siempre fue bastante ecléctico, nuestros discos siempre son variados y tienen varias aristas. Me parece que, sobre todo a nivel lirico, es que le da más un cierre y una unidad a este disco.

Hay varias letras que hablan de lo animal, de lo primitivo.
Nicolás – Sí, de lo instintivo, esa cuestión como fresca, de contacto más directo, con menos retardo con la realidad, o sea, no tan mental sino más viniendo desde el inconsciente, desde los instintos. La imagen del niño en la tapa, también, tiene que ver con eso, hay mucho de esas sensaciones en el disco.

En cuanto al sonido, más allá que hay varias puntas, se nota una mayor uniformidad, respecto a “Sudamericana” ¿Lo sienten así?
David – Sí, puede ser más redondo, más cancionero, capaz. Tiene como ese concepto más cancionero, no la totalidad de las canciones, pero sí, capaz, el grueso del disco no tiene tantos puntos diferentes como “Sudamericana”. Pienso que sí, es un disco más redondo, no conceptual porque no es un disco conceptual pero, tal vez, el concepto musical del disco es más redondo.
Nicolás – También al ser más orgánico, en todos los sentidos, mismo toda la parte de teclas, si bien hay un montón de sintes, hay muchas teclas más orgánicas, piano, Rhodes… Entonces, se emparentan más con las guitarras y se genera una sonoridad mas orgánica y queda como una cuestión bastante integrada.
David – Ayuda mucho el idioma, también. “Sudamericana” tenía temas en inglés y en español, y éste, al ser solo en castellano, tenía también un hilo conductor entre las canciones porque es nuestro idioma y todas las canciones están escritas en castellano.

No empezamos con un concepto muy claro, al menos a nivel de letras y de qué decir en las canciones. Eso seguro que no. Se fue dando a medida que íbamos terminando letras y viendo la conexión entre una y otra hasta poner ese concepto de ‘Sueño Animal’ como nombre del disco.

David Stabilito

¿En qué momento definieron que las letras iban a ser solamente en castellano?
David – Fue Diego el que empezó a insistir, básicamente, con que quería hacer letras en castellano. Tiene un nivel de insistencia tipo carie y, en determinado momento, nos ganó (risas).

Al momento de salir con un tema nuevo después de tanto tiempo, en este caso “Como Animales” ¿Cómo definieron el primer corte de difusión? Porque, perfectamente, tanto “A quemarropa”, “Lo que perdimos” y varios otros temas tienen potencial de single.
Diego – En realidad fue “Fede” Lima, el productor que trabajó con nosotros, el que nos dijo que para él “Como animales” era como una transición entre algo que pasó en “Sudamericana” y éste disco. Y nos pareció que estaba bueno hacerle caso. Pero podría haber sido otro y la idea es seguir sacando cortes. Así que, seguramente, usemos alguno de los que dijiste.

Se había generado mucha expectativa en el público con este trabajo, por lo que no era un tema menor elegir con qué tema salían…
Nicolás – Sí, es verdad. A la hora de elegir con qué salir fuimos cuidadosos de elegir algo que nos gustara, que representara al disco en general, también el tema que tener el espíritu del disco, que no fuera una de las aristas más lejanas. Además, es un tema que la letra nos gusta mucho y tiene mucho que ver con el tópico general del disco. Por ahí pasó la decisión.

¿Cómo fue el trabajo junto a Federico Lima en la producción?
Nicolás – Estuvo “de más”. De hecho, nosotros veníamos trabajando solos, pero los períodos se dilataron mucho, las decisiones tomadas entre tantos, también, y en un momento, te vas agarrando muchos vicios y situaciones que no avanzan. Con “Fede” tenemos mucha amistad hace mucho tiempo y es alucinante trabajar con él y , en su momento dijimos “necesitamos alguien de afuera”.
David – Llegó para poner orden (risas). Por ejemplo, había un exceso de partes en algunos temas y él dijo “no, vamos por acá” y, ahí, nos enfocamos todos en laburar ese lado de las cinco aristas que tenía una canción, capaz. Fue muy claro a la hora de organizar y trabajamos mucho las voces con él, porque éste es un disco muy vocal. Y el trabajo de él estuvo buenísimo. Es un amigo y es una persona que respetamos y admiramos, era uno más, estuvo buenísimo. De hecho, lo contactamos para trabajar, primero, las voces y estuvo tan bueno el laburo que le dijimos “acompañános más como productor hasta la salida del disco” y se re copó.

A la hora de elegir con qué salir fuimos cuidadosos de elegir algo que nos gustara, que representara al disco en general, también el tema que tener el espíritu del disco, que no fuera una de las aristas más lejanas. Además, es un tema que la letra nos gusta mucho y tiene mucho que ver con el tópico general del disco. Por ahí pasó la decisión.

Nicolás Demczylo

¿Tocar en el exterior y conocer otros circuitos, les ayudó al momento de planificar la manera de moverse y proyectar los pasos a seguir?
Nicolás – Éste fue el primer año que tuvimos un calendario armado desde enero. Todas las fechas que estamos teniendo este año, no es que se van consiguiendo, sino que ha habido un cronograma de trabajo en Montevideo y en Argentina, que es, digamos el lugar más próximo, en tiempo y posibilidades, al que nos gustaría llegar más fuerte. Otra de las metas de este año es poder desembarcar un poco más en Argentina y afianzar el público que hay, que hay un montón de gente que le gusta Sante, pero vamos una vez cada mil años, entonces, no se termina de armar algo, pero estamos trabajando en ello.

¿Cómo ven “Sudamericana” a la distancia?
David – Con mucho cariño.
Nicolás – Yo lo disfruto. Con pila de cariño, como dice David. Para nosotros fue un logro hacer ése disco en ése momento. Nosotros somos, básicamente, una banda independiente y todas las empresas que hemos encarado en estos discos han sido grandes y siempre logramos resultados que nos gustan y cada vez mejor, y sentimos que vamos avanzando. Entonces, “Sudamericana” fue un punto de quiebre con los primeros dos EP’s. Tenía otra calidad en todos los sentidos y, también por eso, le fue bastante mejor. Yo, hace tiempo que no lo escucho, pero, cuando me lo cruzo por ahí, lo disfruto.
David – Yo, la última vez que lo escuché fue en un Ta-Ta. Estaba comprando unas latas de verduras y estaba sonando “Brasil” (risas).

Foto: Fernanda Montoro
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