En esta nueva entrevista de nuestra sección Vidas Detrás de la Música, conversamos con Gia Love, pionera del pop femenino en Uruguay, quien nos cuenta acerca de sus primeros años, su acercamiento a la música, el éxito, la escena pop local y más, para conocer a la artista más allá de su carrera profesional.
Por Chenal Innamorato
«Tengo muy buenos recuerdos de mi infancia, me acuerdo que era una infancia llena de creatividad. En mi familia me daban para adelante con toda esa parte mía que era extravagante, fui extravagante desde muy chica, me gustaba disfrazarme, estar siempre bailando. Con mi hermana Luciana (Luciana Acuña, actriz y humorista), armábamos obras de teatro, que mis viejos tenían que venir a ver todas las noches» (ríe) «tenían actuación, canto, baile, nos disfrazábamos, realmente era muy activa yo como niña». Así comienza una nota donde Gianina Acuña a.k.a Gia Love nos cuenta sus vivencias y aprendizajes siempre acompañada por la música. Siendo la menor de cuatro hermanas, menciona que eso tuvo una incidencia en su personalidad, según sus propias palabras «muy rupturista, rebelde digamos, estaba siempre tratando de escaparme de las reglas, tenía una personalidad que para mí era muy divertida, siempre que veo fotos de mí de chica, me veo y me da gracia, siento que podría ser amiga mía de chica».
Desde muy pequeña Gia manifestaba su deseo de ser cantante o «cantora», cosa que «cada vez se hizo más tangible y real para mí porque empecé a componer cuando tenía siete u ocho años, lo seguí haciendo todo el tiempo, y ahora es lo que soy». Su obsesión por la música comenzó con las películas de Disney, donde aparecían los personajes cantando, cosa que la influyó muchísimo y encontró en la música una conexión con otras cosas «Todo eso me prendió algo, me conectó en algo y obviamente me obsesioné y los miraba todo el tiempo». También menciona a Marilyn Monroe y Liza Minnelli, como motores de su acercamiento a la música y al pop «Me gustaban mucho los musicales. Lo mío era un gusto por lo histriónico, lo exagerado, ese tipo de música o el teatro musical tiene mucho de histriónico, vestuarios de brillos, todo era una sumatoria que me emocionaba intensamente». En su casa sus padres no eran músicos, y no se escuchaba ni a Led Zeppelin ni a los Rolling Stones «ni nada de lo que tuviera más onda, sino algo más antiguo, capaz Frank Sinatra, de repente algo de los Beatles. Me acuerdo que había música brasilera, la música no era lo central pero yo la sentía como algo muy central».
La artista nos comenta que hasta el día de hoy conserva amistades del colegio, y que no le gustaba ir a estudiar, «No quería ir, al principio me costaba mucho hacer amigos por eso, inventaba algo para no ir todo el tiempo. Las instituciones, ir a estudiar, no eran lo mío, sobre todo no había algo que me entusiasmara, entonces siempre estaba tratando de faltar. Al principio eso llevaba consigo una baja sociabilidad, pero después se me pasó, y la verdad que nunca tuve problemas para hacer amigos». Gia dice haberse sentido inadaptada en su etapa adolescente, y vestirse «muy rara». «Tenía una personalidad extravagante, y eso me llevó a empezar a internalizar un poco y a descubrir una parte mía. No era mala alumna, pero no era buena alumna, no me vestía igual que el resto, no me interesaban las mismas cosas, me aburría mucho en las clases, era todo una mezcla y una movida interna que me estaba sucediendo».
En su adolescencia era muy fan de la banda irlandesa U2 «para mí esa era la banda, fue la primera banda con la que entendí que la música podía tener un efecto real en las personas. Toda la parte humanitaria me parecía que ellos la volcaban en el escenario, veías un show y recibías también esa energía, que para mí significaba cambiar el mundo, entonces se sumó algo más a eso que sentía que era una conexión con otra parte mía, con mi espíritu que era la música, también se sumaba el poder compartirlo con otra gente, y hacer algo que cambiara». Gia empezó a escuchar mucha música además de la ya mencionada, y conectó por primera vez con el pop de Britney Spears, los Backstreet Boys y NSYNC, artistas muy sonados a finales de los años 90 y principios de los 2000. También señala haber sido influenciada por el artista plástico estadounidense Andy Warhol. «Siento que el pop es como el dios más permisivo, cualquier estilo que vos quisieras hacer podía llegar a ser pop, porque al final el pop engloba las miles de múltiples personalidades y posibilidades que existen».
El cambio es lo que me fortalece y lo que me hace seguir evolucionando como artista y como persona.
Siendo pionera del pop en nuestro país, Gia ha atravesado una serie de dificultades, «era una época donde habían pocas mujeres haciendo música, nadie haciendo música pop, salvo quien para mí era un referente en ese momento, que era Dani Umpi, que abrió muchos caminos también en esa área, pero si decías que hacías música pop era cien por ciento una mala palabra, no se entendía». A pesar de la adversidad, la artista nunca abandonó su sueño. «Quiero hacer esto, no hay chance, no hay nada más que quiera hacer, y lo quiero hacer todo el tiempo» era el pensamiento que rondaba la mente de Gia en esa época según nos cuenta. «En ese momento empecé a hacer videos caseros, filmaba con la cámara que hubiera, me sacaba fotos, me vestía, empecé con toda el área creativa visual, que me acompañó muchísimo, pero tuve que empezar a aprender toda la otra parte que era lo musical, porque yo sabía tocar algunos instrumentos y componía, pero empecé a producir desde el día cero». Gia plantea otra dificultad: «me di cuenta que estaba trabajando solo con hombres, esa era una de las primeras dificultades porque, claro, mi sensibilidad no existía. Cada vez que hacía un show o hacía algo, tenía que tener una personalidad masculina, porque me topaba y trabajaba con hombres todo el tiempo, y así era como me adaptaba, o por lo menos como yo encontré la manera de adaptarme. Hacer un proceso de grabación es medio traumático, y si hay una cierta cantidad de presión, porque la energía masculina es un poco más de la acción, a veces eso te deja una marca que yo tuve que laburar mucho también para poder empezar a cambiar». Dice y continúa “otro tema, era que muchas de las cosas que hacía se confundían con que estaba haciendo eso porque quería seducir, siempre había un tema que se centraba mucho en cómo estaba vestida, en cómo me veía, si mostraba mucho o si mostraba poco. Al principio no lo entendí, para mí era todo divertido, no tenía esa seriedad que después se le daba, yo trabajo mucho el arte a través de la ironía también, que es algo que a mí me gusta, porque me parece que te permite entrar en otra profundidad, aunque para mí era honesto ese tipo de approach en ese momento». En lo referido a ser mujer y hacer pop en Uruguay “la mujer artista, a veces, tiene un estándar que cumplir, tenés que hacer todo bien, el profesionalismo ya es un extremo para la mujer a veces, y para el hombre capaz que no tanto. Es un planteo que me hago y que de repente a veces lo siento de esa manera por mis experiencias vividas, pero también al mismo tiempo entiendo que son procesos y que están cambiando muchísimo».
«Me tocó la suerte de abrir los shows de Rod Stewart y de One Direction, y fue increíble, pero también fue una responsabilidad grande, y me cayeron un montón de fichas también en ese momento, o sea que fue un momento de crecimiento personal grande». Expresa la artista “soy la persona que soy, por la sumatoria de lo bueno y de lo no tan bueno que me ha sucedido». Ríe y continúa «Creo que en el mundo de polaridades vas a vivir las dos cosas en todo momento en la vida. Me siento muy cómoda con el proceso, con el camino, y con todo lo que vengo experimentando. Para mí el éxito es estar conectada, vivir en el ahora, ser consciente, ser feliz, o por lo menos fluir, la felicidad para mí es fluir. Sentir amor todas las veces que pueda, proyectar energía positiva para afuera, hacer lo que amo todos los días, dar lo mejor de mí en todos los lugares a donde voy, a todas las personas con las que me encuentro, para mí eso es el éxito».
Para la artista el cambio es todo y nos habla de la deconstrucción y la construcción constante: “así como cada una de las células de nuestro cuerpo está reciclándose, yo siento que siempre estoy reconstruyéndome, siempre estoy entrando en una nueva etapa, siempre estoy cambiando», expresa. «Antes me costaba mucho el tema del cambio, estoy evolucionando, creciendo, y sigo cambiando, pensando distinto y reformulando todas mis creencias todo el tiempo. Lo estático para mí no existe, justamente estoy en este flow de estar siempre en un cambio constante, más allá del exterior. Es cierto que soy una persona que está siempre cambiándose el color de pelo, corte, o el look, el cambio es lo que me fortalece y lo que me hace seguir evolucionando como artista y como persona».
Dar lo mejor de mí en todos los lugares a donde voy, a todas las personas con las que me encuentro, para mí eso es el éxito.
Manifiesta que la escena pop uruguaya está creciendo rápidamente «Se está llenando de artistas, cada vez están apareciendo más, y no solamente en el pop, en muchísimos estilos. Siento que hay una ebullición muy grande, y me parece que se viene un cambio, donde el arte va a empezar a pisar muy fuerte en este país, y la juventud va a hacer un cambio grande en la apreciación del arte y de los talentos que existen acá en Uruguay. La escena pop es inevitable que siga creciendo, porque hay muchísimos artistas con mucho talento haciendo cosas que están buenísimas, y cada vez va a ser algo más grande y que se va a notar más».
Gia cuenta que para ella la felicidad es ensayar con su banda, porque es algo que le divierte muchísimo, y que al hacer música siente que se abstrae. El poder producir y darle vida a sus temas, el tocar los instrumentos, producir para otras personas, hacer shows en vivo, armar videos, tener ideas, acompañar la música con conceptos, todo eso le genera felicidad. «No sé si tengo un momento pico porque siempre quiero ir más alto, no sé si hay un solo momento, pero creo que todas esas pequeñas cosas son las que me generan mucha felicidad», concluye.
Le preguntamos cómo se imagina en un futuro, a lo que responde “el futuro y el pasado considero que no existen. Siento que lo único que para mí realmente existe es el ahora. El tiempo, el futuro y el pasado no son importantes para mí. Si hay algo que sé, que mientras esté viva voy a estar haciendo música, porque es lo que me gusta, no sé de qué manera, ni en qué forma, pero va a seguir pasando. Espero que cambiando, creando, transformando, todas esas cosas que a mí son las que me divierten, capaz que viajando a otros países a tocar, en muchos proyectos al mismo tiempo, haciendo algo de películas, todas esas cosas me encantaría experimentarlas, produciendo otros artistas obviamente».
Recientemente Gia Love estrenó su nuevo single titulado «Sigues Tú», el cual se encuentra disponible en Spotify, Deezer, Youtube y demás plataformas digitales.