Julieta Díaz y Diego Presa: “Desde las primeras canciones, sentimos mucha confianza en lo que estábamos haciendo”

Luego de publicar en 2021 su EP “El revés de la sombra” y de haber recibido, entre otros reconocimientos de crítica y público, el premio Graffiti como mejores compositores de ese año, Julieta Díaz y Diego Presa publicaron a mediados de este año “Río”, su primer trabajo de larga duración. A través de diez composiciones, el dúo amplía horizontes musicales, texturas y dinámicas, logrando dar un paso más en su trayectoria, consolidando el proyecto, si es que esto era necesario.

El próximo sábado 18 de noviembre, a las 21hs. en Sala Zitarrosa Julieta y Diego presentarán oficialmente en vivo las canciones de “Río”, además de repasar aquél debut discográfico gestado en plena pandemia. A propósito del show conversamos con ellos.

Por Liber Aicardi


Foto: Gisela Filc

¿Cómo vienen llevando estos tres años de dúo, un período que puede tomarse como poco tiempo, pero que ha sido bastante intenso también?
Diego – Lo llevamos con mucha alegría, creo que hemos ido profundizando en el vínculo artístico, digamos, y descubriendo una forma de hacer las cosas juntos. Y eso lo hemos ido encontrando en el camino de este tiempo desde el primer contacto que tuvimos en plena pandemia hasta hoy. Pero son tres años y, aparte, son dos discos, unos cuantos conciertos y esto sigue también, porque tenemos cosas nuevas y continúa siendo algo estimulante en cuanto a lo creativo. Así que yo estoy súper contento.

Julieta – Hago mías las palabras de Diego, porque todo lo que lo que él dijo es así. La verdad que hay algo que sucede desde el principio con nuestro trabajo y, después, también con nuestra amistad que se fue armando, porque en realidad, fue primero el trabajo y después la amistad. Hay confianza y mucho respeto por el lugar del otro, por el espacio del otro. Siempre, la idea es encontrar esa tercera voz, esa tercera orilla como dice Diego siempre, y no solamente afirmarse quizás en lo que uno piensa o lo que uno desea. Estamos siempre a la búsqueda de algo a lo que estamos como entregados y que viene con una fuerza muy hermosa, así que muy feliz, muy contenta y veo que además viene con mucho viento de cola. Nunca pensamos mucho en el futuro, más ahora que estamos pensando en el concierto de la Zitarrosa, por supuesto, y en el de Bebop Club de Buenos Aires, pero porque se va dando. Es como que la rueda va corriendo.

¿Ese mayor conocimiento mutuo notan que se traduce en las composiciones?
Diego – Yo creo que sí. Ya en “Río”, esa profundización en el vínculo y en el conocimiento de la forma de trabajo del otro está plasmado. Hay un paso entre “El revés la sombra” y “Río” que tiene que ver con la frescura del primer encuentro y sumergirse en otras aguas más profundas y también más cercanas a la sensibilidad profunda del otro. Me parece que tiene que ver con, incluso, con la conversación que empezó hace tres años y que continúa, que tiene que ver, por supuesto, con cuestiones personales, pero también con las raíces musicales de cada uno de nosotros. El otro día estábamos hablando con Julieta de que, por ejemplo, yo me acerqué con ella como compositor de canciones a estilos, a géneros y a formas musicales que antes no había explorado y que lo hice de manera muy inconsciente, también; no es que “bueno, ahora estoy componiendo con una música y escritora argentina entonces tengo que explorar determinadas formas musicales”. No lo pensé, no es algo consciente sino que, al tiempo, me di cuenta que me había metido con algunas cadencias y perfumes, digamos, de estilos a los cuales en general no me acercaba y que, creo, tiene que ver con el hecho de estar trabajando con Julieta.

Julieta – En mi caso yo no compongo música, digamos, por supuesto que toco mi instrumento, que es mi voz, pero no toco un instrumento fuera de mí. Lo que yo traigo al dúo, más allá de por supuesto un montón de intuiciones y de cosas quizás más inconscientes y más inasibles, pero concretamente es mi voz, es mi manera de interpretar y mi manera poética de ver las cosas en general y la lírica, pero que también forma a veces una tercera forma. Por ejemplo, en “Río” predominan más mis letras, siempre embellecidas y mejoradas por Presa, pero realmente hay algo ahí que se potencia mucho. Es que somos muy parecidos, no somos iguales, y también por la forma a la cabeza musical de Diego en su poesía, pero también en su música en general.

¿Sienten, de alguna forma, que “Río” es la consolidación del dúo en cuanto a una identidad sonora?
Diego – Yo estoy muy contento con “El revés de la sombra”, también, a la distancia porque de alguna forma logra traducir en esas canciones y en el sonido del disco esa frescura del encuentro de las primeras canciones juntos. Aparte, porque “Flor de agua” es la primera canción que compusimos juntos, entonces creo que el EP tiene ese perfume del primer encuentro. Y en “Río” ya nos animamos a otras cosas, es más amplio, es un paisaje más que se abre a otras posibilidades, entonces creo que eso también está en lo realístico y en el sonido, creo que es un sonido más áspero, más denso por momentos y, también, no es sólo esta cuestión que estamos hablando de que nos conocemos más profundamente sino que también los músicos que nos acompañan también tienen otro recorrido en esto de tocar estas canciones. Las vienen tocando hace más tiempo se metieron más por dentro quizás del universo de las canciones, de la lírica de Julieta, la mía y de estas composiciones. Creo que, de alguna manera, “Río” es un paso más allá.

Hay algo que sucede desde el principio con nuestro trabajo y, después, también con nuestra amistad que se fue armando. Hay confianza y mucho respeto por el lugar del otro, por el espacio del otro. Siempre, la idea es encontrar esa tercera voz, esa tercera orilla como dice Diego siempre, y no solamente afirmarse quizás en lo que uno piensa o lo que uno desea. Estamos siempre a la búsqueda de algo a lo que estamos como entregados y que viene con una fuerza muy hermosa.

Julieta Díaz

A pesar de que tres años no es mucho tiempo, por otra parte ha sido un período productivo, que también les permitió obtener reconocimientos como el Graffiti 2022 a compositores del año. ¿Esto les generó algún tipo de responsabilidad extra a la hora de trabajar en “Río”?
Julieta – Yo creo que cada uno de nosotros probablemente lo viva diferente porque somos personas diferentes, pero además porque también yo con la música tengo un recorrido diferente, no solamente en tiempo sino en forma, que Diego. Yo vengo hace algunos años cantando cosas de otros muy esporádicamente, pero no tan asociado a mi trabajo, muy como coqueteando con eso, salvo alguna cosa muy puntual. Pero sí, a mí a veces me pasa un poco eso, como que hemos tenido muchos conciertos para este tiempo y para estar separados por un río, pero la realidad es que sigue siendo como decís vos, en estos tres años, que no es tanto pero tampoco es poco y además muy sostenido, ya con dos discos yo siento por supuesto esa responsabilidad porque también es un camino más novedoso para mí. Pero como te decía antes, por supuesto que estoy muy agradecida, porque al ir también de la mano de Diego, digamos, se abre otra posibilidad en todo sentido.
La verdad es que, los dos juntos laburando, se hace de una manera muy a la par y muy fluida, también sabemos que la manera de laburar de los dos que, somos súper cautos en un montón de cosas, vamos con el paso a paso, no es que estamos con una ambición desmedida, estamos en un momento todavía haciendo conocer nuestro trabajo.

Diego – Ya, desde el primer puñado de canciones, sentimos mucha confianza en lo que estábamos haciendo. Siempre me sentí muy confiado en ese sentido porque hay un rigor en el trabajo, hay una autoexigencia fuerte. A partir de ahí, lo podemos presentar en cualquier lado, esa es la sensación que me dio siempre, que tenemos espalda. Más allá que, de afuera, quizás está esta cuestión de “la actriz famosa, a ver cómo canta” o “bueno, este pelado uruguayo a ver quién es”. Tanto de un lado como del otro. Pero, más allá de eso, yo enseguida confié en que las armas que tenemos son potentes, entonces se pueden defender en cualquier lado.

¿Notan en los shows que ya hay un público propio del dúo, que va más allá del público de Diego o el de Julieta como actriz?
Diego – Es distinto el público que se fue generando acá, en Uruguay, que el público argentino. A mí me interesa, también, observar eso en general y en Uruguay es un público particular. Parte del público es gente que quizás me venía siguiendo en los proyectos míos, después, curiosos, también gente que se acerca a ver qué es esto tan extraño, esta mezcla tan rara. Entonces no es exactamente el público mío. Pero lo interesante es que lo que nos ha pasado, y creo que Julieta está de acuerdo conmigo, es que esa gente que capaz que escucha por primera vez la música que hacemos y que se acercó capaz que por diferentes caminos, al final del concierto termina como sorprendida, como que se termina enganchado, digamos, más allá de lo que esperaba. Esa es la sensación que he tenido, que es algo muy lindo y la he tenido acá y también en Argentina. En Argentina conocen mucho menos lo que hago yo, pero una vez que escuchan las canciones responden de una manera muy linda, en general el feedback ha sido muy interesante, muy intenso.

Julieta – Yo tengo la misma sensación. Igual, en Uruguay, al conocerse el laburo de Diego heredamos un montón de sus seguidores, algunos curiosos que se acercan, algún que otro seguidor mío de películas o de TV, pero el resultado al final es ese que dice Diego.
En Argentina sí, es más difícil que conozcan quizás el laburo de la banda o a Diego solista. Hay un público pequeño, pero de todas maneras, la gente que se ha acercado se acercó más como con curiosidad, quizás desde mi trabajo, pero es un público también raro porque es un público que viene con una sensación rara, es porque, además, yo soy una actriz que he hecho películas de autor, películas populares, televisión independiente, televisión popular, cine, de todo. Entonces tengo un abanico muy amplio, pero cuando vienen también se quedan sorprendidos con el trabajo del dúo, se quedan sorprendidos con Diego, de repente aparece también su trabajo, se nota quién es él también individualmente más allá del dúo, obviamente, así que se quedan muy, muy gratamente sorprendidos.

Ya, desde el primer puñado de canciones, sentimos mucha confianza en lo que estábamos haciendo. Siempre me sentí muy confiado en ese sentido porque hay un rigor en el trabajo, hay una autoexigencia fuerte. A partir de ahí, lo podemos presentar en cualquier lado, esa es la sensación que me dio siempre, que tenemos espalda.

Diego Presa

¿Tiene un significado especial, principalmente para Julieta ya que Diego ha tocado varias veces, presentar el disco en la Sala ZItarrosa?
Julieta – Para mí y para los argentinos Zitarrosa es un emblema, es otro prócer más rioplatense. La otra vez, en un concierto Diego habló de Zitarrosa, dijo que es “nuestro artista”, no por una cuestión de apropiárselo sino por aclarar que era un artista uruguayo, y alguien del público le gritó “¡nuestro, también es nuestro!”. Porque lo sentimos muy propio a Zitarrosa en Argentina, amamos su música, su militancia, su poesía, tantas cosas y tocar en una sala como esa, además tan hermosa y la verdad, para mí es un lujo. Es un lujo, como fue un lujo también tocar en la Zabala Muñiz o en La Trastienda, son lugares muy grosos. Por eso te digo, que de la mano de Diego y después ahí los dos juntos con nuestro puñado de canciones poder a entrar a esa sala para mí es realmente muy fuerte y lo vivo con mucho agradecimiento, con mucha felicidad.

Diego – Yo recuerdo la primera vez que toqué en la Zitarrosa creo que fue en 2007 con Buceo Invisible, fue un concierto muy significativo para mí y para todo el grupo. Así que ya, desde esa primera vez, en la Zitarrosa han sido, en general, conciertos muy especiales por algún motivo, con una carga emotiva particular. Se ha dado así bien, como, bueno,

¿Qué sigue para el dúo luego de esta presentación?
Julieta – El año se cierra con estas dos fechas, acá y en Buenos Aires, con esta presentación de “Río”, obviamente, bien arriba.
No tenemos nada más cerrado todavía en Argentina. En general, tenemos siempre más propuestas de este lado, pero ahora se están multiplicando un montón también allá. Este año tocamos en Tucumán, en La Pampa, en festivales de cine que nos han llamado para hacer aperturas y para estar dentro del marco del festival. Pero sí, justamente, yo dije que no a algunas cosas de teatro para poder dejar abierto y Diego también está con más apertura de agenda para que este camino que se está abriendo con tanta fuerza pueda seguir creciendo el año que viene, porque este año tuvimos que decir que no a algunos festivales, a algunas fechas por complicaciones, justamente, de agenda porque yo estaba con teatro y otras cosas, y queremos tenerlo despejado para poder ir y venir de un lado al otro.

Las entradas para el show de Julieta Díaz y Diego Presa en Sala Zitarrosa se encuentran a la venta a través de Tickantel.

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