Eli Almic
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Comenzó el mes de marzo, un mes ligado a la mujer, y en #SoyFan no somos ajenos a este hecho. Es por ello que durante este mes, las protagonistas de la sección, serán todas del sexo fememino y, para comenzar, lo hacemos con alguien que en los últimos años se ha convertido en la voz femenina de la escena Hip Hop local. Nos referimos a Eli Almic, quien a principios de año, lanzó su single “Brujas”, un tema que, además de ubicarse entre lo mejor del año que corre, se perfila como un emblema de la lucha por la igualdad de géneros en nuestro país. Eli Almic, que el próximo sábado 3 se presenta junto a DJ RC y su banda en Thelma (Rbla. República Del Perú y Av. Brasil), es fan de la agrupación australiana Hiatus Kaiyote.
Eli comienza contándonos que la vocalista de Hiatus Kaiyote, Nai Palm, “estaría siendo de mis voces favoritas hoy día”, y recuerda que conoció a la banda con su disco “Choose your Weapon” del año 2015, al tiempo que admite “no me acuerdo bien si conocí el disco ‘Choose your Weapon’ a través de videos de YouTube o alguna recomendación”. Para Eli, este álbum de los australianos es un disco “que hay que tomarse el tiempo para asimilar y digerir, rompe con la clásica estructura de lo que podría ser una canción. Amo esa no estructura totalmente estructurada, experimental, las baterías de hip hop súper modernas y esa cosa orquestada de conservatorio pero siempre buscando, probando, mezclando estilos. Del neo soul angelical a unos agudos con aires de canto lírico, jazz, hip hop, mucha textura y sintetizadores increíbles, y una voz perfecta que juega con la banda como pocas veces había visto”.
A la hora de elegir sus cinco temas favoritos, la artista asegura “no poder ponerle orden, ya que todas me gustan mucho”. De todas formas, aquí nos seleccionó su Top 5 de Hiatus Kaiyote, que, además, viene con bonus track.
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Shaolin Monk Motherfunk. Con este track ya queda clara la búsqueda, el goce por mezclar sonidos y texturas donde a veces parece demasiado pero al final te das cuenta que todo cuadra perfecto. Es una montaña rusa musical que se repite a lo largo del disco en varias canciones. El uso de la voz de Nai Palm y la presencia notoria de los coros, la banda como su orquesta personal, me atrapa totalmente para luego irrumpir en un sonido más acuoso con una batería más picadita. Te pones auriculares y se abre tremendo mundo sonoro.
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Breathing Underwater. La introspección de una guitarra que parece que tuviera su propio coro al principio del tema, el agua, la voz de ella y un sinte increíble. La repetición de la palabra cual mantra. La relación de la batería y la voz me fascina en todo el disco, me inspira a hacer algo diferente, a salirme de mi lugar común, el dibujo vocal sobre la armonía de los instrumentos, por momentos como una mimesis. Escucho y pienso “wow! Como se les ocurre todo eso?”. Capas de voces sobre más voces, amo. Y de vuelta la bajada, lo dulce, lo íntimo, deshacerse en el agua.
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The Lung. Simplemente amo todas sus explosiones, es como entrar en un mundo fantástico. Otra vez la repetición y cada sonido súper justificado de estar en ese lugar y no en otro. Soy fan de las baterías y la mezcla en general es impresionante. Es como si pareciera que nunca van a descansar y de repente pajaritos y violines. La guitarra es hermosa y los climas muy originales.
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Swamp Thing Alto poder, alto sinte y piano. La voz que hace lo que quiere porque puede, porque le encanta entrar a un túnel claroscuro y es lo que me identifica tanto. Y en la bajada se une con Fingerprints.
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Fingerprints. Amo esta canción, tiene mucho soul, es bastante más simple, tiene aire, me dan ganas de cantarla, de poder cantarla así transmitiendo eso que ella transmite. Quizá sea de las canciones más convencionales del disco, también necesaria entre tanto estímulo, los tantos coros conviviendo y sumándose una y otra vez.
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Bonus track. Me quedó afuera By Fire y no por creer que es peor que las demás. Tiene unos sintes increibles y juego, riesgo.