Con “Avant Première”, su primer álbum de estudio, BONI canaliza su necesidad de transformar en canciones sus vivencias. Entre el pop y lo urbano, con guiños al R&B, el soul, la bossa nova y la música disco, consolida una identidad propia, apoyándose también en el aspecto visual.
Antes de presentarlo en vivo el sábado 6 de diciembre, a las 21 h, en Sala Zitarrosa, en el marco del ciclo MAREA, conversamos con la artista sobre el concepto detrás del álbum, la experiencia de trabajar con tres productores y la decisión de hacer de “Avant Première” un relato narrativo que expande los límites de lo musical. Las entradas están a la venta a través de Tickantel.
Por Liber Aicardi
Foto: Difusión
¿Cómo fue el proceso de “Avant Première», tu primer álbum?
Al principio yo no sabía que iba a ser un disco, compuse canciones por el hecho de componer y transformar cosas que sentía. Yo creo que el primer tema fue “Bailar Sola», que fue el primero que salió también. Antes de participar de La Voz Argentina ya lo veníamos trabajando y cuando volví dije: “quiero sacarlo ya”. Y hay un tema, ig, que es “Canción de Desamor”, que es anterior a “Bailar Sola”, que es un tema que siempre estuvo y siempre lo toqué en vivo, pero fue de los últimos que produje para el disco. Yo sabía que quería que entrara, pero fue de los últimos que le dimos forma, más allá de la forma que tenía en vivo. Pero eso: al principio fui haciendo temas y en un momento sí dije “ta, esto me parece que es un disco” y, a partir de ese momento, empecé ya a darle más esa intención de disco. Igual, yo veía que todos los temas tenían como un denominador, que era, capaz, la etapa de la vida en la que los hice, esto marcado por el espectáculo, el show, La Voz Argentina y todas las cosas que me pasaron en torno a eso. Veía que todos tenían sentido y después ya ese sentido fue más consciente, de querer que este disco sea conceptual y seguir yendo para ese lado.
¿Sentiste que tenías que dejar sentada una cierta etapa de tu carrera?
Sí, sentí que sí, y tampoco lo elegí tanto porque se dio. A mí me pasa mucho que las canciones que voy haciendo son un reflejo directo de lo que estoy viviendo, entonces no hubiera podido escribir de otra cosa o dejar de lado lo que estaba viviendo en ese momento. Entonces, las canciones marcaron solas el camino y yo ayudé.
Y respecto de “Impuntual”, tu EP de 2021, ¿ves que hay una continuidad?
Siento que el disco es un material más maduro que el EP, es lo primero que se me viene de decirte, no sé si yo, o la música, o todo está como más maduro que al principio. El EP fue mi carta de presentación, pero ahora ya me presenté, tengo algunas cosas más para decir, pero continuidad capaz que sí, porque siento que en estilo me reconozco en los dos. Siento que estoy ahí, va en la misma línea, pero con otra madurez, con otra intención, con otras búsquedas también.
También el tema de ser un álbum con más canciones te permite desarrollar mejor un concepto…
Tal cual. Yo me acuerdo, en el disco, en un momento, pensar: “acá me gustaría tener algo, por ejemplo, un tema que sea como más para abajo”, como que ya lo venía anticipando, y ahí el tema que surgió, por ejemplo, fue “Una Peli”. Es un tema que es una transición ahí, que no tiene estribillo —cada tanto también me mando algún tema sin estribillo, como medio indie—. También en el EP hay uno que se llama “Overall”, que fue el primer tema que yo hice, que también no tiene estribillo, es cortito, pero transmite lo que quiero transmitir. Siento que en esto de hacer un disco ya iba viendo momentos, necesitaba un momento que transmita esto, otro que transmita esto otro.
¿En qué momento encontraste el concepto de “Avant Première», que va más allá de meramente las canciones y el disco?
En el momento de “Bailar Sola» yo no tenía ni idea. Yo creo que cuando produje con Nahuel Piscitelli, que hicimos “Mufa” y “Plot Twist”, ahí me parece que empecé a ver que quería sumarlo a lo que venía haciendo y veía que todo tenía sentido y quería plasmarlo todo junto. Yo creo que fue por ahí. Además, ya se estaba gestando en mí porque, en el tema que tenemos con Lucas Cary (“Cine Francés”), yo digo el nombre del disco sin saber que iba a ser el nombre de mi disco —“terminó otra vez en el avant première de un film que nunca voy a ver”—, pero sabiéndolo como en algún plano. Yo siento que ya estaba ahí, faltaba darme cuenta y decir “voy a sacar el disco”.
El álbum empieza con un verso que dice “últimamente veo que todo lo que toco se rompe”. No es un verso fácil de asimilar al inicio de un disco, hasta te toma de sorpresa. ¿Cómo fue la decisión de arrancar una canción de esta forma y encima que sea lo primero que uno escucha?
Sí, que además arranca en seco, o sea, no hay música antes, es mi voz ya con esa frase… Esta canción la hice en uno de esos momentos —y cada tanto me pasa—, son como esos momentos en que está la nube negra. Yo ya tenía cosas anotadas de ese sentido de “no me sale una” y con Nahuel le dimos forma a eso. Esa frase me cala profundo, me siento identificada e incluso en el merch que estamos armando para la Sala Zitarrosa va a haber dos diseños de remera: uno dice “Avant Première» y el otro dice “todo lo que toco se rompe”, o sea, hasta ese punto. Yo me tomo en serio esa frase porque mi música, yo la pienso así, surge de una necesidad, de querer cierta canción o de querer plasmar algo que no he escuchado. Porque, a veces, los temas de otros pueden ser muy parecidos, pero no dicen exactamente lo que yo quiero decir. Entonces, creo que surgió también de plasmar eso, como esa desgracia o ese sentir de “no puede ser”. Y va sin preámbulos, así, es eso, ese es el concepto de la canción también, “todo lo que toco se rompe”.
Me pasa mucho que las canciones que voy haciendo son un reflejo directo de lo que estoy viviendo, entonces no hubiera podido escribir de otra cosa o dejar de lado lo que estaba viviendo en ese momento. Las canciones marcaron solas el camino y yo ayudé.
¿Cómo elegiste hacer la versión de “Cha Cha Muchacha”?
Bueno, esa versión yo la había hecho hacía mucho tiempo antes de La Voz Argentina. Me acuerdo que la hice, a mí me gusta mucho versionar. Mi trayecto como artista empezó versionando canciones y en muchos lugares, en eventos, casamientos, bares, y ahí siento que fui afinando mi estilo, porque al principio, capaz, respetaba mucho las canciones y después ya no tanto, o sí, pero desde otro lugar. “Cha Cha Muchacha” siempre fue un tema que me encantó desde chica y dije “voy a hacer esto de desnudar la canción y llevarla como a algo más simple”, esto sola en mi casa. Y después fue una de las canciones con las que audicioné antes de las audiciones que se vieron en la tele, en todo ese proceso. Y la quise hacer porque sentía que estaba ahí como esa búsqueda mía, que no era solamente ir y cantar. A la vez, me pasa esto con cualquier canción: yo, cuando escucho canciones y saco los acordes, hay algo que me fluye para ese lado minimalista. Siento que, capaz, me es más fácil hacer esta versión que tratar de reproducirla tal cual es, no me cuesta eso, desnudar una canción y cantarla con los acordes que tenga la canción, pero como chiquita.
“Bailar Sola” es una canción que tiene tres años y muchas veces pasa que los músicos eligen centrarse en sus últimas canciones a la hora de la selección de cuáles son las que integran un disco. En este caso decidiste recuperarla y para cerrar el disco. ¿Tuviste siempre claro que pertenecía a “Avant Première»?
Es que no la quería dejar afuera. Yo la considero como un poco atemporal para mí, porque también tiene esto de que es, bueno, es un feat. con Bonet, con mi hermano, y habla de nuestra madre, entonces eso para mí ya es atemporal. Capaz que, a veces, me he cansado un poco de tocarla y me tomo un tiempo, pero después me encanta retomarla. Tiene eso, que siempre me va a generar algo lindo, cantarle a mi madre lo podría hacer para siempre.
Y ponerla última en el disco también fue una decisión pensada, no iba a innovar con un final, pero igual me gustó. Es como ir a un lugar conocido y terminar el disco con ese abrazo así, también para arriba porque es un tema movido.
¿A qué se debe la decisión de trabajar con tres productores?
Con Emiliano Aquino, Agustín Casulo y Nahuel Piscitelli, la verdad, porque los quiero mucho, pero, aparte, porque fueron parte del proceso. Con Agustín hicimos el EP, con Emi empezamos a jugar, vi que me entendía de una manera hermosa y no quería, igual, dejar de producir con Agustín. También, en paralelo, estábamos haciendo otros temas y lo de Nahuel fue un poco imprevisto porque nos conocimos en Argentina, en un show, yo fui a cantar con Lucas “Cine Francés” —era un show de Lucas y me invitó—, él me vio, le gustó y me invitó a su casa en La Plata para hacer un tema. Y para mí fue un desafío porque no me gusta componer con otra gente, y menos tomarme un barco para eso. Fui con algo ya pronto porque no quería dejarlo tampoco a “lo que saliera”. Entonces fui y terminamos haciendo dos temas. Y también me gustó el desafío y conocerme en eso de mí también y respetarlo. Nahuel fue como algo que cayó de repente y me enseñó mucho toda esa experiencia y después dije “quiero que estemos haciendo el disco con los tres, siento que va bien en un mismo lugar”.
Me gustó también que no fuera un productor solo, porque, además, yo no soy productora y tampoco me quería tirar al agua o casarme con un productor y hacer todo este proceso, sino más de ir viendo qué sale con cada uno, cómo conectamos y que todo eso vaya para el mismo lugar.
Más allá de eso, hay una identidad propia reconocible que trasciende a la producción…
Yo creo que eso puede ser también un poco por esto de que no voy nunca sin nada. Sí, le doy libertad a los productores y respeto mucho su estilo, su trabajo, pero siento que voy con una idea muy clara. Entonces, capaz que por ahí puede venir eso. Siento que, al tener en claro eso, capaz que sí, ahí está más como esa convicción, de que fui con cada uno y dije “yo quiero esto así”.
Mi música surge de una necesidad, de querer cierta canción o de querer plasmar algo que no he escuchado. Porque, a veces, los temas de otros pueden ser muy parecidos, pero no dicen exactamente lo que yo quiero decir.
¿En qué momento te surgió la idea de realizar un visualizer con todo el disco?
A mí me gusta mucho el audiovisual. El terreno del cine es algo que me encanta, que no lo estudié, que quizás en algún momento estudie algo de eso, porque me encanta. Entonces, veo que a veces se me cuelan ideas de videoclips cuando estoy componiendo, incluso. La idea de hacer el visualizer surgió, en realidad, de cara al preestreno del disco, porque ya habíamos sacado tres adelantos del disco, que cada uno tenía su videoclip. Yo disfruté muchísimo hacer todos los videoclips con los chicos de Distante Producciones, que con ellos hago todo, nos entendemos divino. Los temas que tenían videoclip también los plasmamos de nuevo en el visualizer, con ciertos guiños a sus videoclips y al universo “Avant Première». Eso es lo que más me gusta: crear un universo que tenga guiños, que quien se meta entienda quiénes son los distintos personajes, qué pasa, por qué están haciendo esto. Creo que de ahí también me inspiré un poco en The Lumineers, que es una banda cuyos videos están todos conectados y eso me encanta, me genera algo de lo que quiero hacer en algún momento, de conectar videoclips.
¿Cómo estás proyectando llevar el disco al vivo en el show de presentación en Sala Zitarrosa?
Es tremendo, porque tocar en vivo es como otro arte. Está la parte de producir y la parte del estudio, pero en vivo es otra cosa. La idea es potenciar todo eso, mismo desde lo estético, desde el arte, que yo trabajo mucho con Pía Magalhaes, que es una amiga, que es directora de arte, y estamos también viendo cómo podemos plasmar ese círculo de la portada en el escenario en la escenografía. Pero después, dejar también a que las canciones tomen la vida, de escucharlas en vivo, y eso me emociona mucho. La “Canción de Desamor”, por ejemplo, escuchar a la gente puteando y todo eso, generar momentos en el vivo me encanta. Nos hemos juntado mucho con Emi Aquino que, además de ser uno de los productores, es baterista en mi proyecto, para armar el set list, para hacer maquetas de cómo vamos a hacer cada canción, para ver cómo va a ser el recorrido emocional. Todavía estamos en eso.
¿Qué se viene para el próximo año?
Ahora se viene seguir tocando este disco, es lo que quiero. Estamos viendo la posibilidad de que salga una gira de verano por el este y después, el año que viene, también presentarlo en Argentina, eso me encantaría. Y seguir tocando un buen tiempo y, a la vez, ya es algo que está pasando, que es que van surgiendo nuevas canciones que no sé a dónde irán, pero surgen y yo les doy bola, las dejo entrar y están ahí. Yo me imagino como que están esperando el trámite de migraciones y yo les pongo el sellito y vienen (se ríe). Yo las siento así.
Foto: Difusión