Los Durillos: Rock arachán no extinto

#DesdeAdentro

Los Durillos son una banda de la ciudad de Melo con una fuerte influencia del rock rioplatense y un sonido rengo – ricotero que ha alcanzado una identidad y un estilo propio logrando desprenderse de su pasado como un trio que versionaba a las dos míticas bandas argentinas. Nacen en 2014 y, lentamente pero a paso firme, comienzan a componer sus propios temas. Cuando son convocados a participar de un festival en el teatro de verano de su ciudad, surge el nombre del proyecto tras una búsqueda al azar en un diccionario (o al menos así lo cuentan ellos).
Apuestan a la autogestión grabando por su cuenta y encargándose, también, de la mezcla y masterización de su material. Cuentan con un primer trabajo de estudio, «Profundo» editado en 2020, con canciones poderosas que han logrado hacer sonar en varios departamentos del país. Su corte difusión es “Quimera” y lo acompaña un video clip grabado en el Aeroclub de Melo. Charlamos con Diego Brum, vocalista de la banda, sobre la crítica social en el rock y la escena musical en su localidad.

Por Andrea Villar Miravalles

¿Amigos que armaron una banda o músicos que se hicieron amigos?
Un poco de cada cosa. Al inicio fuimos tres amigos que empezamos a tocar en bares y eventos privados. Cuando decidimos armar la banda e incluir bajista y baterista convocamos a dos amigos más que habíamos hecho gracias a la música. A pesar de cambios en la composición de la banda, quienes han llegado han sido todas personas que hemos conocido en este mismo camino y con los que al momento nos une una amistad.

¿Qué impronta le imprime a su sonido el ser una banda de Cerro Largo? ¿Tienen algún referente local o sonido que encontremos en sus canciones?
La influencia de la zona sobre nosotros es nula, no hay nada local que se refleje en lo que hacemos. Personalmente siempre me gustó el rock rioplatense y eso es algo que no es muy popular en nuestra ciudad. Tampoco tenemos un referente local. Intentamos tener un sonido propio más allá de seguir una línea bastante marcada por algunas bandas que seguimos desde hace muchos años.

¿Cómo fue el proceso de composición de los temas de “Profundo”? ¿En qué se sumergen Los Durillos para buscar inspiración?
El proceso de composición no es algo que tengamos muy estipulado, por lo general, solemos partir de una letra o en algunos casos de una melodía sobre la que después cada uno viene y aporta lo suyo. Más allá de ponernos de acuerdo, hemos llegado a grabar varias versiones de un mismo tema para luego finalizar con los arreglos. Si pasan unos meses sin que hagamos una canción llamamos a la inspiración reuniéndonos para conocer las ideas que podamos tener cada uno. Han salido varias cosas de este tipo de instancias.

En su tema “Desidia” cantan “Y no da para seguir dando la espalda
a todos esos que matan sin piedad”. ¿Acompañan el sentir de que el rock debe embanderar causas sociales y contener una constante crítica?

Este tema en particular es una crítica a todo lo que la desidia (falta de ganas o interés) conlleva. Somos una banda que transmite mensajes sin banderas políticas, profesando lo anárquico del rock y entendiendo que debemos cantar sobre todo lo que está mal, por lo que siempre tenemos algo que decir. Incursionamos en nuestras letras en una crítica social percibiendo que en todos los frentes están sucediendo cosas con las que no estamos de acuerdo.

En sus pasajes por Montevideo vivieron alguna que otra mala experiencia en cuanto a convocatoria en algunos espacios. ¿Por qué creen que pasa eso con bandas del interior? ¿Problemas de difusión, contar con un público meramente local, demasiada oferta similar en la capital?
No tuvimos buenas experiencias, pero, supongo que es parte de esto que hacemos. Fuimos a tocar, prácticamente teniendo que pagar para hacerlo, porque nos exigían venta de entradas. Nos vendieron una propuesta y termino siendo un show para dos personas. Esta y otras experiencias hicieron que tomemos la decisión de seguir tocando en nuestra ciudad donde hay gente que nos sigue y en festivales en otros departamentos. Volveremos a la capital cuando se den otras condiciones.

Son reconocidos como grandes exponentes del rock en su ciudad lo que les ha permitido compartir escenario con bandas como 4 Pesos de Propina en el Florida Rock en 2017 y La Triple Nelson en Melo. ¿Qué aporta como experiencia participar de festivales donde se accede a presentar su trabajo frente a un gran público y en otros departamentos?
No sé si somos reconocidos como grandes exponentes del rock en nuestra ciudad, lo que si es que llevamos muchos años y eso ha hecho que mucha gente de acá nos siga y nos conozca. Cuando tocamos va mucho público, la pasan bien y eso es lo importante. La gran ventaja de compartir festivales con grandes bandas es que el escenario se prepara para este tipo de artistas. Sabemos que cuando nos invitan vamos a tener un buen retorno, buena iluminación y lo aprovechamos para mostrar lo nuestro.

Cada año en Melo se lleva adelante el festival “Fin de año a todo Rock” ¿Cómo nace ese evento, quiénes lo organizan y qué significa para las bandas de la escena local la posibilidad de participar?
El festival “Fin de año a todo Rock” históricamente es organizado por las propias bandas locales, buscando apoyos por varios lados. Hace un par de años que estoy en la organización con un amigo de la movida de Melo. Lleva mucho trabajo, sobre todo salir a buscar sponsors, pero se disfruta y por eso vale la pena. El día del show se llena la plaza de gente, hemos llegado a reunir casi seis mil personas ya que viene gente de otras localidades. Es el único festival de bandas locales del departamento.

Diego Brum: Voz (y saxo en las grabaciones)
Joaquín García: 1a guitarra
Eduardo Fagundez: 2a guitarra:
Adrián Araújo: Bajo
Diego Cristiano: Batería

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