Punkzer acaba de publicar a través de las diferentes plataformas digitales “Versiones acústicas”, un álbum en el que recorre buena parte de sus clásicos, justamente, en formato acústico. En el reciente lanzamiento, el cuarteto ganador del Premio Graffiti 2020 a Mejor álbum de Punk por su trabajo “Contratodo” (2019), nos ofrece una nueva mirada de su repertorio, distanciándose de su clásico sonido punk rock, pero, manteniendo e incluso potenciando la riqueza de sus melodías y arreglos vocales. A propósito del nuevo disco, conversamos con Santiago “Tato” Filgueira, vocalista y guitarrista de la banda, en la entrevista que te compartimos a continuación.
Por Liber Aicardi
¿Cómo surge “Versiones acústicas”?
Surge, básicamente, por la pandemia. A causa de eso nos vimos como en un umbral que, si bien no teníamos gente que abastecer como las bandas más grandes, sentíamos que teníamos un compromiso para con nuestra gente. Entonces dijimos “¿Ó nos quedamos parados ó hacemos algo?” Eso fue lo que yo les planteé a los gurises. Surgió la idea de empezar a componer un nuevo disco. Lo cual hicimos, estamos trabajando en un disco nuevo, pero, decidimos con mi hermano, con Pepe, sacar algún acústico a dúo porque en pandemia no nos podíamos juntar, estábamos respetando los protocolos y no nos podíamos juntar con toda la banda. Entonces, como mi hermano se vino a casa, empezamos a trabajar acústicos a dos guitarras hasta que un día le grabamos una batería a una de esas canciones y era otra cosa. Ahí fue que decidimos elegir un puñado de canciones recorriendo la discografía y versionarlas. Versionamos algunas más pero no nos convencieron, dijimos “vamos a hacer un disco cortito y ver cómo lo recibe la gente”.
¿En qué se basaron para hacer la selección del repertorio?
Yo, desde un principio, tenía muy claro que no quería transformar las canciones en un cien por ciento, pero, sí, hacerles una producción nuevamente, con arreglos nuevos, cambiando incluso voces principales en algunos tonos y buscando que la canción se luzca un poquito mejor. Y nos pasó que elegimos dieciséis o diecisiete canciones y descartamos las que no nos convencieron. Pero fuimos eligiendo probando, básicamente. Íbamos repasando disco por disco, con una guitarra acústica, tirando un pedacito de canción, tirando estribillo, tirando estrofa y eso como que fue decantando. Incluso, después, de tener el disco grabado hicimos una revisión y quedamos conformes. No nos quedamos con ganas de hacer muchas cosas más. Hay un par de temas que nos arrepentimos de no haber hecho, pero nada más que dos canciones. Después, en el resto, mantuvimos esa elección.
¿Les pasó de redescubrir canciones?
Sí, a todos nos pasó. Me atrevo a decirte que en el cien por ciento del disco nos genera una cosa más linda esta versión que la original. En todas estamos encantados con el resultado, pero la que nos voló la cabeza fue “Pikachu”, que es del (álbum) “Made in China”. Yo lo escucho en el “Made in China” y no sé si es por un tema de desgaste, el sonido del disco o la inmadurez de nosotros y ciertas cosas, pero nos encontramos ahora con otra canción, completamente.
Esta forma de revisitar el repertorio te da, también, la oportunidad no sé si de corregir errores, pero sí de probar otras cosas en las canciones ¿no?
Es que sabés que estás en lo cierto. Sí, corregimos errores. Me refería a eso mismo, que el disco tiene errores, que está bien, son errores naturales, pero, sí, está eso, también, de hacer cosas que te quedaste con ganas. Agarramos las canciones y nos pusimos como a producirlas de vuelta, pensamos cada coro de nuevo “¿esto era así? Bueno, ahora ¿cómo lo harías?”. Eso lo laburamos mucho con mi hermano. Él está muy metido con el tema de las voces y las armonías. Para lo claro que teníamos las canciones y el disco ya ensayado nos llevó pila de tiempo porque nos re colgamos con la parte vocal y de arreglos.
¿Para vos, particularmente, te demandó un trabajo mayor en lo vocal? Te lo pregunto porque en este formato la voz queda más expuesta.
Y sí, sinceramente, tuve que hacer muchísimos ejercicios vocales más que de costumbre, por ejemplo. Yo, personalmente hice un trabajo porque me encontré con eso que vos decís: la voz mucho más adelante, predominando mucho más, está como más desnuda porque tiene menos ruido alrededor. Me tuve que preparar pero fue una cosa que me ayuda a crecer como cantante. Uno empieza, al encontrarse más desnudo cantando, empezás a conocer un poco más limitaciones, también. Estuvo buenísimo porque, para mí, fue un desafío tremendo.
¿Cómo surge la versión con piano e instrumentos de cuerdas de “Esa sensación”, que es la más distinta a la original?
Como yo estaba muy metido, siempre estoy muy de lleno con el proyecto, que es algo que me ocupa mucho tiempo y es por elección propia. Y ya que tenía más tiempo libre que de costumbre, me metí más de lleno todavía. Me pasó que escuché una versión que terminé de rebote escuchando en YouTube una canción que era con piano, cellos y violines y contacté a una amigo, Francisco Romero, y le dije “quiero hacer esto con esta canción, tirarla en piano más o menos con este tempo a ver qué se te ocurre” y él me tiró la pieza de piano esa que la escuchaba sola y se me erizaba la piel. Y yo estaba convencido que quería chelos y violines, entonces Juli Guerriero me contactó con una chica que toca el chelo y ella, a su vez, se contactó con un chico que toca el violín y nos vinimos un día al estudio y le dimos.
Ahora que dieron ese paso de incluir ese tipo de instrumentación ¿ves la posibilidad que puedan incorporarla en nuevas canciones?
Sí. Creo que nos pasó algo que fue algo que fue salirnos de nuestra zona de confort, que pensamos que iba a ser algo incómodo o difícil y, no te digo que nos fue fácil pero nos sentimos súper cómodos en el sentido que fue algo que nos agradó al oído enseguida. Nosotros no estamos acostumbrados a curtir ese tipo de música, por ejemplo. Incluso, acústica porque, yo, más allá de escucharte el Unplugged de Nirvana o algún disco de Foo Fighters acústico, no he curtido en mi vida y ahí me abrió el espectro porque, desde que hicimos eso, yo estoy escuchando otras cosas, también. Y yo digo, siempre, que un compositor compone en base a lo que escucha, entonces, me parece que para el próximo disco van a haber otro tipo de arreglos como con (órgano) Hammond y teclas en estribillos, por más que no sea punk rock, creo que sí vamos a sumar esas cosas. Vamos a probar, no quiere decir que vayan a quedar pero las ganas están.
¿Hay planes de trabajar este disco y este formato acústico con shows en vivo?
Sí, serios planes. Queremos hacer, si nos sale, una especie de gira de shows íntimos obviamente, respetando los protocolos, pero, sí, la idea es salir a tocarlo. No queremos que sea sólo un recuerdo de la grabación sino hacer algún show con eso y también, está atado un poco a cómo lo reciba la gente ¿no? Porque, para nosotros es toda una incógnita eso. Pensándolo en voz alta nos podemos encontrar con gente hasta que no sigue a Punkzer en su formato estándar o nos podemos encontrar con que a la gente no le guste, directamente; la verdad no lo sabemos. Por lo que fue el single que salió que fue “Quiero decirte”, tuvimos re buena repercusión, ojalá que el resto del disco la tenga y lo mismo con el tema a piano. A mí me encantaría ese tema, también, sumarlo al repertorio.