Galería: Buitres – 35 Años

Aquella noche del debut, allá por diciembre de 1989 en el pub Laskina, seguramente ni Gustavo Parodi, ni Gabriel Peluffo, ni José Rambao, tridente fundacional de los entonces Buitres Después de la Una, nunca imaginaron que 35 años más tarde seguirían juntos, sobre las tablas y celebrando atravesar cuatro décadas y tres generaciones de seguidores con sus canciones. Tampoco la centena de presentes entre el público, muchos de ellos atravesando el duelo de la disolución de Los Estómagos, apenas tres meses antes. Pero, así fue.

Hoy, en 2024, a lo largo de seis fechas (4, 5, 11 y 12 de octubre, 1 y 2 de noviembre) en La Trastienda MVD con entradas agotadas, convocaron nuevamente a sus fans para, justamente, celebrar el aniversario, la obra y, quizás por encima de lo anterior, la permanencia.

El pasado fin de semana, Buitres se presentó en la clásica sala de la calle Fernández Crespo cerrando este ciclo de recitales celebratorios. A diferencia de otros aniversarios que tuvieron como marco recintos de mayor capacidad locativa (Teatro de Verano, Velódromo, Antel Arena), la opción de La Trastienda jugó en favor de la cercanía entre público y banda, al tiempo que, como ya es oportuna costumbre, el ahora quinteto se permite ciertas licencias al recuperar canciones que han quedado en el largo camino recorrido sin que el show decaiga. Por el contrario, por momentos ofician de respiro para ambos protagonistas, donde el disfrute pasa más por la apreciación y el recuerdo que por el agite.

Desde el arranque con “Calaveratur”, emblemático comienzo de sus shows, hasta el cierre dos horas y monedas más tarde con “Cadillac Solitario”, pasaron 31 de las más de 130 composiciones del grupo que visitó a pinceladas casi toda su discografía de estudio. No faltaron los clásicos “Condenado el corazón”, “Buena suerte!”, “Soy del Montón” (con bandera alusiva desplegada sobre el público), “Ojos”, “El tercer deseo”, “A cartas vistas”, “Azul”, “La copa”, “Mincho Bar”, “Carretera perdida”, “Ojos rojos”, “No te puedo matar” y el himno autorreferencial “Buitres”, entre tantos otros. También hubo momentos para hurgar dentro del enorme baúl compositivo, rescatando “Fabulario”, “5 segundos”, “Todos borrachos”, “Un paso en el desierto”, “Ya no saben qué decir” y “A veces”, al tiempo que “Frío Oscuro” y “Avril” (esta última en la voz de Gustavo Parodi) recordaron el ADN estomacal, por más que en este punto de la carrera también se pueden considerar clásicos de Buitres.

Rumbo al cierre del show, en una de las últimas intervenciones de un Peluffo visiblemente contento, el vocalista retribuyó al público con un sincero “gracias por querernos tanto”, lo que habla de que el disfrute está intacto. Algo que garantiza que los Buitres seguirán sobrevolando por mucho tiempo más. Ya, rumbo a sus 40 años de trayectoria.

01/11/2024 – La Trastienda MVD
Fotos: Paul Hernández
Texto: Liber Aicardi


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