Lo que Montevideo Rock 2017 nos dejó

Volvió Montevideo Rock y, al igual que en 1986, se realizó en su locación original, la Rural del Prado con entradas agotadas. A diferencia (una de tantas) de aquella ocasión, la grilla contó exclusivamente con artistas nacionales. Acá te compartimos un resumen de lo que fueron estas dos jornadas de música.

Por Liber Aicardi

Enlaces históricos
El colectivo ideado originalmente por Juan Casanova y Sebastián Teysera, presentó un espectáculo Homenaje a Montevideo Rock 1986, en el que varios artistas (desde Guzmán Mendaro, Gabriel Peluffo hasta Mónica Navarro y los propios Casanova y Teysera) interpretaron nuevas versiones de canciones de aquella época. Pero no sólo eso. Además hizo justicia con algunos temas e intérpretes, poniéndolos en un merecido cuadro de honor como lo son Alejandro Ferradás, con la canción “Usando mis pies” (de su banda de los 80’s Séptimo Velo) y Leonardo García (de la desparecida banda Zero) cantando “Ahuyentando el miedo”. Como si no alcanzara, Gabriel Peluffo cantó “Gritar” de Los Estómagos.

Las referencias (y auto-referencias) al Rock post-dictadura
Más allá de la propuesta de Enlaces, muchos artistas incluyeron en sus sets temas pertenecientes al Rock Uruguayo de los 80’s y, en algunos casos, reinterpretados por sus mismos creadores que estuvieron presentes en aquella primera edición. Así, El Cuarteto de Nos volvió a tocar, luego de más de una década “Andamio Pijuán”, La Tabaré hizo lo propio con “Sigue siendo Rocanrol”, Buitres con la habitual “Frío Oscuro”, además de “Solo” de Los Estómagos, Hablan Por La Espalda se despachó con “Gritar” (acertadísima elección), también de Los Estómagos, la banda más revisitada ya que el show de Enlaces también incluyó “Gritar”, “En la noche” y “Ningún lugar”.

Rada es Rock
Una de las presencias más cuestionadas por cierta parte del público, a la hora de conocerse quienes actuarían en el festival, fue la de Ruben Rada. Que el candombe, que no es Rock y ese tipo de argumentos arcaicos en tiempos donde musicalmente, en especial en nuestro país, todo tiene que ver con todo. Rada “peló” un histórico setlist que puso las cosas en su lugar. Sobre el escenario principal de la Rural del Prado sonaron, entre otros clásicos, “Dedos”, “Eloísa” y “Negro” de Tótem, además de otros pertenecientes a su carrera como solista como “Blumana”.

Un sueldo solo no alcanza
Es sabido que acá nos conocemos todos. No solamente eso. Varios músicos subieron más de una vez al (los) escenario (s), pero no como invitados sino como miembros estables de las bandas. A saber: Gustavo Antuña, minutos después de tocar con Buenos Muchachos, volvió al escenario Montevideo para hacer lo mismo con El Cuarteto de Nos; idéntico caso fue el de Matías Rada que, luego de tocar con Peyote Asesino, regresó como parte de la banda de su padre, Ruben Rada; Santiago Peralta (guitarrista) y Andrés Coutinho (baterista) tocaron el viernes como parte de la banda de Riki Musso y el sábado repitieron con Eté & Los Problems. Pero el caso más peculiar fue el de Javier Depauli, quien también forma parte de los Fabulosos Los Formidables y, además, se hace cargo de los teclados en algunos temas de Buitres. Éstos debieron ajustar el orden de sus canciones para que Depauli, que estaba culminando su actuación con Riki Musso en el otro escenario, llegara en tiempo y forma para sumarse a la banda.

El fin del mito sobre Buenos Muchachos
Cuenta la leyenda urbana que el show de Buenos Muchachos no es apropiado para las grandes audiencias, por sus características climáticas y que su hábitat natural son los lugares cerrados y de menor capacidad. Falacia. Los liderados por Dalton ofrecieron un altísimo espectáculo para los más de 15000 presentes, al momento de su actuación, donde se dieron el lujo de obviar “He never wants to see You (once again)”.

Los hermanos sean unidos
Un hecho curioso es que compartieron cartel, inclusive día, y hasta superponiéndose en un par de temas, El Cuarteto de Nos y Riki Musso. Sobre el final del show del Cuarteto, simultáneamente, en el escenario menor, Riki Musso comenzaba su set junto a sus Fabulosos Los Formidables. Además, éste, dedicó “Ya te vas a mejorar” a sus ex compañeros de banda. De salón.

El poeta dijo la verdad
El show de La Trampa fue uno de los más esperados del segundo día y colmó, ampliamente, las expectativas del público. El momento a cappella, de “El poeta dice la verdad”, fue coreado por todas las gargantas allí presentes. De lo más emotivo del festival.

El Peyote asesinó
Desde la reunión de la banda, el año pasado, sus shows ganaron en contundencia e interpretación con la incorporación del ya mencionado Matías Rada (guitarra y coros) y Bruno Tortorella (teclados y pistas). Pero, el show del día sábado fue tan efectivo como arrollador. Intercalando clásicos de su álbum debut y “Terraja”, más el single recientemente lanzado “Bailando samba” (que era interpretado por primera vez ante un público masivo y que calza naturalmente en el repertorio “peyotero”) la banda dio un show potente y ajustado. Seguramente, uno de los mejores en esta etapa de Peyote Asesino.

Calma que sucede a la tormenta
La Vela Puerca fue la banda encargada cerrar la primera jornada de Montevideo Rock y cerró su intenso show de una hora y media de duración con una versión acústica de “José sabía” coreada por todos sus fanáticos. Como para bajar los ánimos de las ocho horas de “agite” que le precedieron.

#NasserAlMontevideoRock
Luego de la polémica generada en las redes por el propio Jorge Nasser al reclamar un lugar en el festival, argumentando que estuvo en la primera edición, la “remó” 15 años con Níquel y “Además necesito laburar” (sic), finalmente, el artista se dio el gusto de estar sobre el escenario de La Rural. Así fue que No Te Va Gustar (banda que integra su hijo Francisco) lo invitó sobre el cierre de su show, junto a Christian Cary, para interpretar el clásico de Níquel “Candombe de la aduana” y “Gris” de Loop Lascano. Dato: en Montevideo Rock III (1991) donde los cabezas de cartel fueron Paul Simon y The Cult, los únicos artistas nacionales presentes fueron Eduardo Darnauchans, Buitres y Níquel, con actuaciones de no más de quince minutos cada una. En aquella ocasión, el entonces líder de Níquel se dirigió al público, al cerrar su show diciendo “ojalá el próximo Montevideo Rock sea un verdadero Montevideo Rock” aludiendo, claramente, a la escasa participación de artistas locales, que se limitaron a telonear a los internacionales, además del destrato que recibieron. Las vueltas de la vida quisieron que esta edición de Montevideo Rock tuviera presencia exclusiva de artistas nacionales, pero Nasser no formó parte de la grilla.

La antorcha de Tabárez
Eté & Los Problems dieron uno de los mejores shows de ambos días. Para cerrar el mismo, con el tema “No sé lo que pasó”, Ernesto Tabárez bajó del escenario, micrófono en mano, al grito de “¡Fuego! ¡Fuego!” (así la letra de la canción) a mezclarse con el público, apoderándose de una bengala a modo de antorcha, metáfora que el propio cantante adoptó para su disco “El éxodo”. Inmejorable cierre del escenario menor en dimensiones, no así en calidad artística.

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