En 2019 la banda Rojo Tres comenzó su camino cimentado en un sonido punk rockero, con reminiscencias del rock uruguayo post-dictadura del que su baterista Marcelo Lasso fuera protagonista, primero con Los Estómagos, luego con Buitres y con Trotsky Vengarán por un breve período.
Tras la edición de su primer álbum “Tiempos”, en 2021, el grupo se consolidó apoyado en sus shows dentro del circuito local captando un público emparentado con estas y otras bandas referentes del género.
Hace unas semanas – acompañado de su respectivo videoclip – vio la luz “Jueves contigo”, el primer adelanto de lo que será el segundo disco del, ahora, quinteto y que verá la luz en los próximos meses.
El próximo sábado 13 de mayo, a las 21:30 hs. en Tazu Bar Cultural (Canelones 780) Rojo Tres se presentará junto a las bandas Ruido Salvaje y Blisters en una noche de guitarras filosas.
A propósito de la fecha conversamos con Marcelo sobre la actualidad del grupo, de la forma en que vive esta nueva etapa dentro de la música y de lo que se viene para Rojo.
Por Liber Aicardi
Foto: Claudia RodríguezEn la entrevista que hicimos el año pasado me decías que aún te costaba tocar la batería. Hoy, con el rodaje de los toques ¿ya podés decir que ya agarraste ritmo?
El gran problema son los veinte años que pasaron sin tocar ¿no? Y al momento de volver a tocar, eso se nota y se siente. Y, si bien ya le agarré el ritmo a tocar, igual siempre hay algún calambre o algo que aparece en algún momento, que no debe aparecer, pero lo sobrellevo bastante bien. Estos cuatro años han servido para empezar a volver a poder tocar. Y le voy agarrando más o menos de vuelta la onda. Lleva tiempo, pero va saliendo.
De todas formas, el año pasado ha sido un buen año de toques para Rojo Tres ¿no?
Sinceramente, para nosotros es lento, como pasa todo en Uruguay, en cuanto al hecho de poder instalar el nombre de la banda y que las canciones se conozcan, pero, de todas maneras yo estoy muy contento con lo que ha pasado desde el primer año a la fecha. Te repito, es lento. Pero cada año notamos que hay más gente que conoce la banda, hemos visto caras nuevas cada vez que nos hemos presentado y eso es fundamental. El año pasado tocamos menos de lo que nos hubiera gustado tocar, la verdad es esa. Pero tuvimos el festival de Atlántida a comienzo de 2022, que estuvo bárbaro y son esas oportunidades en las que vos podés mostrar lo que haces a un montón de gente que habitualmente no la tenés toda junta. Y la idea de este año es tocar un poco más que el año pasado. Pero cero queja. Al contrario, estoy muy contento con todo lo que ha pasado con el disco y con el público en vivo. La verdad, hemos recibido un apoyo bárbaro siempre, cada vez que hemos tocado.
¿Se puede decir que Rojo Tres encontró un espacio dentro de un público rockero fiel a un estilo de rock uruguayo de los 80s y 90s?
Yo creo que sí. Por las veces que he podido charlar con la gente que nos ha ido a ver, es gente que son seguidores de las bandas clásicas de rock uruguayo, o por lo menos lo que yo le llamo rock uruguayo clásico, dejando de lado la etapa de los 70s y viniendo de los 80s para acá. Y es público seguidor de Buitres, Trotsky, en su momento La Trampa, y tenemos la suerte que nos da la oportunidad de ir a un show nuestro por curiosidad o porque escucharon en la radio o, simplemente, por el hecho que es la banda en la que yo estoy tocando y toqué anteriormente con ellos. Pero se puede compartir perfectamente con el público y creo que pasa, además, con un montón de otras bandas. Sí, hay mucho público fiel al rock clásico de los 80s, de los 90s y de los 2000 también.
¿Cómo te sentís con el hecho de volver a batallarla en lugares chicos?
Esto que está pasando con Rojo, lo más parecido a lo que me había pasado fue la etapa de cuando hice la suplencia de Trotsky, que no era la banda que hoy está instalada como banda popular y tocábamos mucho en sótanos y lugares chicos, a excepción de alguna Factoría o algo puntual. Para mí es todo una “novelería” el hecho de arrancar bien de abajo, porque cuando entré en Estómagos, ya hacía tres años que estaban tocando y la etapa mía en Buitres, en la que fui fundador hasta el 97, ya veníamos con todo el trabajo previo de Estómagos y fue relativamente más fácil, porque también tuvimos difíciles con Buitres. Ahora hay una movida que yo desconocía sinceramente. Te cuento una anécdota curiosa: el primer show que fuimos a tocar, llegué a la prueba de sonido y le digo a Claudia, mi pareja y manager de Rojo: “no llegó la gente de los equipos, no están instalados todavía” y viene alguien y me dice “no, los equipos que hay para tocar son éstos” ¡y eran un par de cajas y dos o tres micrófonos! Y me fui acostumbrando a cómo era la movida. Siempre igual nosotros, con Rojo, tratamos de tocar con las condiciones básicas necesarias para que la gente que paga la entrada realmente disfrute el show, tratar de sonar lo mejor posible, llevamos equipos si no hay, completamos la iluminación, etc. Pero la movida en sí del under y arrancar de cero a mi no me pesa en lo más mínimo. Al contrario, me gusta tratar de buscar junto al resto de la banda y Claudia, el lugar que queremos ocupar. Y la batallamos de abajo, sin problema y sin que se caiga ningún anillo. Y me gusta muchísimo, la movida del under me parece fabulosa. Hay bandas que realmente son increíbles, es una movida que, de repente debería tener un poco más de apoyo.
La movida del under y arrancar de cero, a mi no me pesa en lo más mínimo. Al contrario, me gusta tratar de buscar junto al resto de la banda y Claudia (manager), el lugar que queremos ocupar. Y la batallamos de abajo, sin problema y sin que se caiga ningún anillo. Me gusta muchísimo. La movida del under me parece fabulosa, hay bandas que realmente son increíbles. Es una movida que, de repente, debería tener un poco más de apoyo.
Cuando arrancaste en Los Estómagos eras el más joven de la banda y ahora te toca estar del otro lado y ser el más grande. ¿Tocar con gente más joven te da otra energía?
Sin duda que te da energía. Te da más energía, te da ganas de hacer cosas más a futuro. Yo siempre bromeo en los ensayos o en alguna charla y digo “ojalá me dé el tiempo para hacer esas cosas”. Eso te da ganas de proyectar, un empuje y de repente vos estás medio chato en algunas cosas y ellos están siempre pujando y con ganas de hacer más. Por ejemplo Leo, que es el fundador junto conmigo, ya está pensando en próximas fechas después de ésta del 13 de mayo. Están siempre pensando para más adelante y eso está buenísimo, para gente ya con unos cuantos años está bueno.
Se te nota en un rol más relajado, al menos hacia afuera y a través de las redes. ¿Con qué tiene que ver eso?
Es que el tiempo pasa – no es ninguna novedad lo que estoy diciendo – y vos vas entendiendo cosas que, de repente, cuando eras joven, no entendías o estabas en contra de todo y todo te rompía los cocos. Por ejemplo, en la época de Estómagos y gran parte de Buitres habían notas y yo no iba. Con el tiempo, te das cuenta del valor que tiene una nota sea en el medio que sea, todo suma y positivamente a la banda. Y yo en ese momento no lo entendía. Siempre fui muy rebelde en un montón de cosas y pensaba como casi todo el mundo que mi opinión era la posta ¿no? Después, con el tiempo, te das cuenta que la cosa va por otro lado. Yo me dediqué, desde hace muchos años, al tema de la comunicación, y con esa postura obviamente no me iba a ir bien. Creo que fue un cambio progresivo. Claudia tuvo mucho que ver, me fue aflojando un poco y sí, son dos personas muy diferentes la de aquella época y la de ahora. Por lo menos, en la cuestión de la comunicación. Siempre fui de hacer chistes, pero no me mostraba así. En la interna de los ensayos y las grabaciones siempre era el payaso de la banda, toda la vida, pero al momento de mostrarme ante el público o en una nota ponía una pared. Después te das cuenta que no es así, y que si soy de hacer chistes y bobadas, las hago en los videos también. Y nos ha ido bien con el tema de promocionar las cosas desde ese lado. He comprobado que por el lado del humor sumás un montón de público y, en definitiva, decís lo que querés decir.
¿El ingreso de Flavio Vezzoso como segunda guitarra responde a una necesidad de la banda para buscar otros colores en ese rol?
Flavio es el tercer intento de tener una segunda guitarra. Hubo dos músicos previamente que por cuestiones musicales no quedaron en la banda, y Flavio reunía todas las condiciones que nosotros buscábamos. Por encima de lo musical va siempre la buena onda y el que estemos cómodos tocando, en este caso, los cinco. Y además toca bárbaro.
La cuestión de sumar otra viola es para que el vivo sea lo más fiel a cómo suena la banda en el disco. Nosotros necesitábamos alguien que esté apoyando lo que hace Leo, con un colchón, para que él pueda hacer sus arreglos y sus cosas, aunque también Flavio tiene su espacio para que haga sus arreglos y sus cosas. Pero, básicamente, era para apoyar a Leo en vivo. Ahora, cuando grabemos, veremos cómo rinde una segunda viola en un disco. Si bien Leo grababa tres cuatro guitarras en las grabaciones, es distinto toque, es otro sonido diferente, también.
En la época de Estómagos, y gran parte de Buitres, habían notas y yo no iba. Con el tiempo, te das cuenta del valor que tiene una nota sea en el medio que sea, todo suma y positivamente a la banda. Y yo, en ese momento, no lo entendía. Siempre fui muy rebelde en un montón de cosas y pensaba, como casi todo el mundo, que mi opinión era la posta ¿no? Después, con el tiempo, te das cuenta que la cosa va por otro lado.
Recientemente publicaron el “Jueves contigo” el primer adelanto del nuevo disco. ¿Podemos tomar el tema como referencia del sonido que va a tener el segundo álbum?
En realidad, justo, esta canción no es un ejemplo ciento por ciento valedero de lo que son la gran mayoría de las canciones de Rojo, que tienen una presencia atrás de distorsión empujando. Y seguramente tampoco sea la mezcla que vaya a ir en el disco. Fue una grabación que quisimos mostrar como previa del segundo disco, pero, probablemente, se vuelva a mezclar o se vuelva a grabar.
Y el video lo hicimos como siempre, con recursos y básicos y sin gastar dinero como hemos hecho con todos los vides de Rojo. Hacemos todo nosotros, desde la filmación hasta la edición, lo tratamos de hacer lo más simple posible, sin mayores gastos y mostrar lo que en ese momento tenemos ganas de mostrar y éste queríamos hacerlo así como salió, mostrar un poco de cada uno de nosotros y que la canción en sí sea la protagonista y no tanto la imagen. Espero que lo hayamos logrado.
¿En qué etapa se encuentra la banda con respecto al nuevo disco?
Ya están las canciones, son diez canciones como el disco anterior. Elegimos ese número porque nos fue muy bien con el disco “TIempos”, y por una cuestión de cábala elegimos diez canciones. El disco está pronto para empezar a grabarlo. Supongo que pasado el toque del 13 de mayo, a los días ya estemos arrancando con las bases para meternos de lleno en eso y terminarlo. No tiene nombre todavía, pero están todas las canciones esperando para entrar a grabar.
¿Qué podés adelantar del show del 13 de mayo en Tazu?
Vamos a estar haciendo las canciones del disco “Tiempos”, vamos a hacer muchas canciones del disco nuevo, como siempre va a haber dos o tres temas de Estómagos que no faltan nunca. La idea es pasar un rato con bandas de rock en un lugar muy lindo, es el lugar donde más hemos tocado, estamos muy cómodos, creo que la gente también. Hay entradas anticipadas y, obviamente, va a haber venta de entradas en la puerta.
La invitación es para escuchar tres bandas de rock de distintas generaciones y edades.
Las entradas anticipadas para el show de Rojo Tres, Ruido Salvaje y Blisters se pueden conseguir a través del cel. 094923876 y tienen un valor de $280.
Foto: Claudia Rodríguez